Como una estrella. Estudiantes de la Universidad de Texas toman fotos del presidente Barack Obama, en el Gregory Gymnasium del campus de la Universidad de Texas en Austin.
El gobernador de Texas, Rick Perry, pidió al presidente Barack Obama el urgente despliegue de mil soldados de la Guardia Nacional en la frontera a fin de confrontar la creciente amenaza de los cárteles de la droga.
En una carta entregada ayer a la Casa Blanca, el gobernador texano, Rick Perry, advirtió que frente a la ausencia de una fuerte presencia federal 'es sólo cuestión de tiempo antes que esa violencia afecte a más inocentes estadunidenses'.
El propósito de la misiva, apuntó el mandatario republicano, fue para poner de relieve 'la extrema amenaza que se está desarrollando en nuestra frontera Sur en la forma de cárteles internacionales de la droga y pandillas transnacionales'.
Perry citó seis instancias que -dijo- demuestran que la violencia desatada por estos grupos ha alcanzado ya a comunidades de la frontera Sur de Texas y que requiere ser confrontada. 'No podemos permitir a estos cárteles creer que son libres de extender sus alcances a través de la frontera, dentro de suelo estadounidense', indicó en la carta entregada en Austin a la consejera presidencial Valerie Jarret.
Perry insistió que la necesidad de mayor seguridad en la frontera Sur de Texas que 'no puede continuar sobreestimada por el Gobierno Federal', calificando la situación actual como una amenaza de seguridad nacional.
Aunque Obama anunció el envío de mil 200 soldados de la Guardia Nacional a la frontera de Estados Unidos con México, Perry dijo que los 286 asignados a cubrir los mil 920 kilómetros de la frontera texana 'son claramente insuficientes'.
En adición al despliegue de más soldados, Perry solicitó el rápido despliegue de vehículos aéreos no tripulados. El mes pasado la secretaria de Seguridad Interna, Janet Napolitano, dio a conocer la solicitud de dos unidades de este tipo, uno de los cuales tendrá su base de operación en Texas.
Elimina EU comando de fuerzas conjuntas
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, anunció un plan de ahorro que incluye un recorte del 10% en la contratación del personal externo y la eliminación del Comando de Fuerzas Conjuntas (JFCOM) .
Gates dijo en una rueda de prensa que estos recortes son necesarios para que las Fuerzas Armadas dispongan del presupuesto necesario después de varios años de guerra.
"La tarea que tenemos ante nosotros no es reducir el presupuesto de primera línea del Departamento sino de reducir considerablemente los gastos generales y los excesos y utilizar el dinero ahorrado en reforzar las estructuras y modernizar" el Departamento.
El presupuesto actual de Defensa, excluyendo el costo de las dos guerras abiertas, es de 535 mil millones de dólares, y la administración ha solicitado al Congreso para el año fiscal 2011, que comienza en octubre, 549 mil millones de dólares. En la estrategia para minimizar gastos, el Pentágono prevé reducir los contratos de empresas externas un 10% anualmente durante los próximos tres años.