Brigadistas del Instituto Estatal de Protección Civil de Oaxaca "realizan un monitoreo de vigilancia constante en las regiones del Istmo de Tehuantepec, Cuenca del Río Papaloapan, Valles Centrales y Mixteca, afectadas a consecuencia de las intensas lluvias que se han registrado", informó el gobernador Ulises Ruiz.
"En apoyo a las familias damnificadas, la entrega de víveres se realiza mediante un puente aéreo, además de iniciar con la cuantificación de daños para registrar un censo de las pérdidas materiales y con ello, activar los recursos correspondientes", agregó.
El gobernador de Oaxaca hizo un llamado "a los mexicanos para que acudan a las delegaciones de la Cruz Roja a entregar víveres, como medicamentos, agua embotellada, colchonetas, cobertores y alimentos no perecederos, mismos que serán distribuidos entre la población afectada".
El director del Instituto Estatal de Protección Civil de Oaxaca, Carlos Ramos Aragón, dijo que de manera preliminar se existen aproximadamente 289 mil damnificados en cerca de 250 municipios y cerca de 72 mil viviendas dañadas, además de severas afectaciones en la red carretera estatal.
La Comisión Nacional del Agua, informó este miércoles que la presa de almacenamiento "Benito Juárez" localizada en el municipio de Jalapa del Marques, en la región del Istmo de Tehuantepec, alcanzó "un almacenamiento del cien por ciento de su capacidad, derramando los volúmenes excedentes".
El desfogue actual es de 729.00 metros cúbicos por segundo, por lo que el organismo recomendó, por medio de un aviso especial dirigido a las poblaciones ribereñas del Río Tehuantepec que se ubican aguas abajo de la presa, "continúen atentos a las indicaciones de Protección Civil y a los boletines especiales que emita la Conagua, por las posibles lluvias que puedan presentarse".
La ciudad de Tehuantepec, sufrió inundaciones el pasado fin de semana, a consecuencia del incremento del nivel del río a consecuencia de las intensas lluvias que han caído en la zona.
Hasta el momento, unos 20 ríos y arroyos se han desbordado en el territorio oaxaqueño, lo que ha provocado daños tanto en viviendas, campos de cultivo, tramos carreteros y en edificios públicos como escuelas y centros de salud, de acuerdo a diversos reportes de autoridades municipales y de protección civil.