El coordinador del PAN en el Senado, Gustavo Madero insistió en que se debe extraditar al agente de la patrulla fronteriza de Estados Unidos que asesinó de un balazo al menor Sergio Adrián Hernández.
El también presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara Alta rechazó, además, la explicación de autoridades de esa nación que señalan que las piedras son armas mortales.
En entrevista, se dijo de acuerdo en que el agente estadounidense pueda ser traído a México con el fin de que pague por ese crimen.
Recordó que esa petición corresponde hacerla al Gobierno Federal y los senadores piden que se atienda precisamente esa inquietud.
Madero recordó que el miércoles pasado se iba a aprobar un punto de acuerdo de condena en el Congreso de la Unión, pero por falta de tiempo no fue así.
Rechazó las acusaciones del vicecoordinador del PRD, Silvano Aureoles Conejo, en el sentido que por "andar en el glamour" los legisladores no aprobaron el punto de acuerdo en la comisión permanente de la Comisión Permanente.
Aclaró que "no hubo tiempo", pero ya había consenso entre los grupos parlamentarios. Lo de las piedras -sentenció a pregunta expresa- trata de ser una justificación, "pero es inaceptable".
Recordó que quedó grabado el exceso y el abuso de la fuerza contra un menor mexicano, que no corría en ningún momento peligro la vida del agente migratorio, y que se suma a las agresiones contra mexicanos.
El senador por Chihuahua también recordó otra grabación que revela el sufrimiento al que fue sometido el migrante mexicano Anastasio Hernández, esposado y sometido, que al final falleció.
