El presidente de Chile, Sebastián Piñera, y la escritora Isabel Allende, transmitieron un mensaje de esperanza a los 33 mineros atrapados en el yacimiento San José, en medio del optimismo por los avances en los trabajos de rescate y la euforia por el Bicentenario de Independencia del país.
"Esta es mi quinta visita. Espero que la próxima sea para abrazar a los 33 mineros como presidente y en nombre de todos y cada uno de los chilenos", declaró el mandatario tras dar inicio a los trabajos de una tercera perforadora.
"Los mineros resistieron, se mantuvieron unidos y lucharon por sus vidas", dijo Piñera al subrayar que esta entereza constituye un ejemplo para un país que estos días celebra los 200 años de su independencia.
"El espíritu que se ha vivido en esta mina San José es el que queremos que sobreviva para siempre en nuestro país", subrayó el gobernante y agregó que tiene confianza en que lo que empezó como "una posible tragedia" terminará siendo "una bendición para Chile".
El presidente llegó este domingo al yacimiento San José acompañado de la escritora Isabel Allende, recientemente galardonada con el Premio Nacional de Literatura y quien había expresado su deseo de visitar a los obreros sepultados desde hace un mes y medio. "Vengo de fuera, de California, y en todas las pantallas de televisión del mundo están los rostros de los 33 mineros, está el nombre de Chile", declaró emocionada la autora de "La casa de los espíritus".
Al lado de su prima, la senadora socialista hija de Salvador Allende que se llama como ella, la escritora confesó que todos los días recibe cientos de mensajes de personas preocupadas por la suerte de los mineros.
"Rezan por ellos, les mandan mensajes de ánimo y energía, y también de agradecimiento a la gente que está aquí trabajando día y noche sin parar para rescatar a sus compañeros. Eso, para mí, es muy emocionante", aseguró.
México participa
Una delegación del Heroico Colegio Militar de México se sumó a la celebración del Bicentenario de la Independencia de Chile, al participar en la Gran Parada Militar con motivo del Día de las Glorias del Ejército chileno.
El destacamento, que portó una bandera de México, estuvo integrado por 17 cadetes del Heroico Colegio Militar, además de un jefe y un oficial, quienes portaron como armamento una espada y 14 mosquetones calibre 7.62 milímetros. La representación mexicana se sumó a las delegaciones castrenses de otros siete ejércitos extranjeros.