La mayoría de los policías de una pequeña municipalidad del estado sureño de Guerrero renunció luego de una emboscada el fin de semana que dejó dos agentes heridos.
La Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero informó en un reporte que seis de los once policías del municipio de La Unión presentaron su renuncia, lo cual llegó a las autoridades estatales a movilizar 20 agentes estatales para asumir las tareas.
Tras la renuncia el lunes, sólo quedaron el jefe de la policía municipal, el subdirector policial, un agente responsable del resguardo de las armas y los dos policías heridos que fueron hospitalizados.
El comandante de la Policía Estatal, Javier Benítez, dijo el martes a la AP que los 20 efectivos estatales permanecerán hasta nuevo aviso en La Unión, una municipalidad vecina al balneario turístico de Zihuatanejo, a unos 600 kilómetros al suroeste de la ciudad de México.
El sábado, los policías municipales realizaban la búsqueda de unos presuntos asaltantes cuando fueron emboscados por hombres armados y lesionaron a dos de los agentes.
''El problema de seguridad más importante en La Unión es la delincuencia organizada. Vamos a continuar con esta labor de seguridad hasta nuevo aviso, hasta que se restablezca la seguridad municipal'', señaló Benítez.
Algunas municipalidades mexicanas han visto renunciar a sus policías en los últimos años ante ataques o amenazas del crimen organizado.
