Opinión. Hortensia Aragón, secretaria general del PRD.
A 42 años de la masacre de estudiantes en la Plaza de la Tres Culturas de Tlatelolco, el PRD sostuvo que "las lesivas" condiciones políticas y económicas de la sociedad del momento, que detonaron las manifestaciones multitudinarias de 1968, siguen vigentes.
Hortensia Aragón, secretaria general del partido del sol azteca, advirtió que pese a las condiciones que vive el país "el papel que jugaron los jóvenes en el entorno social ha cambiado diametralmente" pues hoy se han convertido en "parias sociales".
Dijo que la conmemoración del 2 de octubre de 1968 debe ser la oportunidad para que el Gobierno Federal impulse verdaderas oportunidades laborales y académicas suficientes para que los jóvenes mexicanos no tengan que encontrar salidas fáciles para sobrevivir y mantener a sus familias.
No queremos -puso énfasis Aragón Castillo- más empleos temporales en los que sus derechos como trabajadores no estén garantizados y estén desamparados de la seguridad social que como tales deben tener.
Indicó que el Gobierno debe invertir en programas integrales de largo plazo de fomento al deporte y de combate a la drogadicción, con orientación adecuada desde las escuelas para evitar que jóvenes y adolescentes caigan en las garras del narcotráfico y se conviertan en los futuros asesinos.
Señaló: "de haber sido los abanderados de las demandas de generaciones enteras, impulsores de la economía de toda una nación y constructores de las bases de convivencia armónica de nuestro país, nuestros jóvenes hoy se encuentran confinados por los gobiernos neoliberales priistas y panistas a ser simples parias sociales".
La chihuahuense apuntó que actualmente 7 millones de adolescentes y jóvenes se encuentran sin objetivos definidos y con un futuro en el que la única opción para ellos es sumarse a las filas de la delincuencia organizada, por falta de escuelas y de empleos que les permita desenvolverse con dignidad.
"Según datos del Inegi, en 2008 existían 683 mil jóvenes desempleados de entre 20 y 29 años, pero la cifra aumentó este año a casi 942 mil, lo que significa un incremento de casi 260 mil jóvenes más sin empleo -tan sólo en ese rango de edad- en casi dos años.