No se encontraron rastros de cadáver en descomposición en el agua de la presa La Rosilla, de Pueblo Nuevo, aseguró Martín Rocha Hernández, titular de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado de Durango (Coprised).
A más tardar en 10 días la localidad contará con una planta potabilizadora de agua.
Explicó que ya concluyó el análisis de muestras del liquido, en las cuales se encontraron 2 mil colonias de coliformes fecales; mientras que dio negativo la prueba de nitrito, mineral que se desprende de los restos humanos o de animales, por lo tanto, la contaminación sólo se debe a las condiciones ambientales.
Recalcó que el agua de la presa no es apta para consumo humano; pero si para uso doméstico.
No se han recibido denuncias de otras presas, el caso de ésta fue único por las denuncias del posible arrojamiento de cuerpos. La cloración fue insuficiente para tratar el líquido. El nivel de cloración en el estado es de 70 por ciento en promedio, un poco menor en zonas lejanas como Topia y Otáez.