El secretario de Hacienda y Crédito Público, Ernesto Cordero Arroyo, adelantó que el próximo periodo ordinario de sesiones podría presentarse la iniciativa de Ley de Quiebras Bancarias, con lo que terminaría la última etapa de resoluciones bancarias.
Durante su participación en el Foro La Función de la Banca para la Estabilidad y el Crecimiento Económico, el funcionario comentó que a través de esta ley se permitirá liquidar a un banco cuando caiga en insolvencia a través de un proceso eficiente, que minimice el costo fiscal.
Además de que mejore la posibilidad de recuperación de sus activos en un entorno de mayor certidumbre jurídica.
Explicó que 'es una ley muy relevante porque pone orden a posibles instituciones bancarias que tengan problemas de insolvencia y es una manera de resolver ordenadamente al menor costo fiscal posible y en el menor tiempo posible una quiebra bancaria que siempre son complicadas'.
Ernesto Cordero comentó que la crisis mundial reciente dejó muchas lecciones, sin embargo "se debe ser cauteloso para que las modificaciones derivadas de este hecho no resulten excesivas ni limiten la capacidad de la banca para ser el motor del desarrollo económico".
Con esta ley terminaría la reforma del sistema financiero que inició después de la crisis bancaria de 1994-1995.
Refirió que a nivel internacional se buscan respuestas concretas en el ámbito de regulación y supervisión al sistema financiero, que permitan evitar lo ocurrido en la crisis del año pasado.
'Sin embargo estas medidas deben ser analizadas con cuidado, entendiendo que una sobre regulación puede convertirse en un obstáculo para el crecimiento económico, sobre todo en países como México, donde la regulación y supervisión existentes en el sistema financiero han dado muy buenos resultados'.
No obstante, advirtió que aún se enfrentan riesgos por lo que vale la pena actuar con prudencia.
Comentó que internamente, para el gobierno federal la prioridad es mantener la solidez y solvencia del sistema financiero; así como detonar mayor financiamiento para sectores productivos, infraestructura y la vivienda.
Así como ampliar la penetración del sistema financiero para que llegue a todos los segmentos de la población con una mayor diversidad de productos.