Un joven de 14 años fue asesinado por un agente de la Patrulla Fronteriza a las orillas del Río Bravo; el Congreso de Chihuahua condenó el hecho. (AP)
Activistas estadounidenses presentarán una denuncia penal por el asesinato de un niño mexicano en Ciudad Juárez, Chihuahua, por un elemento de la Patrulla Fronteriza que le disparó desde El Paso, Texas.
Christian Ramírez, director del Comité de Amigos Americanos, consideró que es una manifestación de racismo que se ha intensificado desde que se promulgó la iniciativa SB 1070, en Arizona, y advirtió que la situación podría empeorar.
Dijo que en los próximos días reunirán pruebas para presentar una denuncia, ante este hecho que además de xenofobia demuestra exceso de fuerza y que si queda impune, agravará el clima de odio.
Apenas la semana anterior, el Comité de Amigos Americanos y la Unión de Libertades Civiles (ACLU, en inglés), presentaron una denuncia ante el Departamento de Justicia estadounidense para que investigue la muerte de Anastasio Hernández Rojas, otro mexicano asesinado a golpes por una veintena de agentes migratorios del vecino país.
El hombre intentó resistirse a su deportación sin que se le atendiera de una lesión que le habían provocado agentes de la Patrulla Fronteriza al detenerlo la mañana de ese mismo día, el 28 de mayo.
Los hechos fueron vistos por decenas de testigos, entre ellos varios agentes del Instituto Nacional de Migración (Inami) quienes confirmaron que a Anastasio lo golpearon y dieron descargas eléctricas hasta que le provocaron muerte cerebral y después que falleciera.
Ramírez recordó que como en el caso de Ciudad Juárez, la ACLU y el Comité de Amigos Americanos reunieron pruebas para presentar la denuncia y exigir que se esclarezcan los hechos.
