Presente religión en cine mexicano
En el segmento “Barbacoa de chivo” de la película Cero y Van Cuatro, el personaje interpretado por Silverio Palacios, insulta a Dios por no tener dinero para curar a su hija enferma de cáncer.
Cuando se le preguntaba al actor qué se sentía hacer eso, sólo reía, pero aclaraba que era sólo un papel. Apenas meses antes la Iglesia había tenido un papel fundamental en el éxito de El Crimen del Padre Amaro, al recomendar a sus feligreses que no la fueran a ver. Ambas historias habían cambiado la manera en que el cine mexicano se refería a temas religiosos.
Por medio de estos filmes, se tratará de entender la manera en que la religión ha sido vista por la pantalla.
LA VIRGEN QUE FORJÓ UNA PATRIA
Un clásico en estas fechas. La historia comienza en la noche previa al grito de Independencia, cuando Miguel Hidalgo y Costilla explica a un temeroso Ignacio Allende, por qué deben elegir el estandarte de la Virgen como bandera.
Entonces vemos a Juan Diego, su relación con la Iglesia y su pueblo.
Ramón Novaro, Domingo Soler y Gloria Marín eran los protagonistas.
MARÍA MAGDALENA
Dirigida por Miguel Contreras Torres en 1945, la película mostraba a María Magdalena (Medea de Novara), como una cortesana que recibe un amuleto por parte de un príncipe egipcio.
Cuando conoce a Jesús decide regalar sus bienes, liberar a sus esclavos y lavarle los pies en señal de respeto.
Cuando Jesús resucita habla con ella. Al morir, el espíritu de la mujer sube al Cielo. Fue de las más taquilleras en ese año.
UNA TRILOGÍA
Entre 1969 y 1970 el director Miguel Zacarías llevó a la pantalla grande la vida del personaje en tres películas: Jesús, el Niño Dios; Jesús, María y José y Jesús Nuestro Señor. A Claudio Brook le tocó representar al ungido en la última de las películas. Al actor argentino GuillermoMurray le tocó ser José y a Gayle Bedall, la Virgen María.
FE, ESPERANZA Y CARIDAD
Era 1972 y tres cortometrajes hacían un viaje por la religiosidad mexicana. Está el fakir que se viste como Cristo y realmente es clavado en la cruz en el interior de un circo; una peregrinación sirve para que un grupo de hombres viole a una mujer y una anciana religiosa causa muertes al repartir dinero. Aclamada por la crítica.
NUEVO MUNDO
El director Gabriel Retes creó una historia donde se contaba que en pleno siglo XVI, la milagrosa Virgen había sido pintada por un artista a petición de un importante religioso.
Los indígenas caían rendidos ante su belleza y los involucrados eran asesinados para evitar que se supiera la verdad. La censura llegó a ella y no salió a cines.
CRISTO 70
Dirigida por Alejandro Galindo, inicia cuando un grupo de jóvenes roba dinero y se esconde en un pueblo. La comunidad los invita a participar en los festejos de Semana Santa. El líder de la banda es elegido como Cristo y los otros dos, Dimas y Gestas. Cuando parece que van a ser delatados, uno de ellos hiere al Cristo, quien muere a navajazos mientras está crucificado.
CANOA
Basado en los sucesos de ese pueblo poblano, muestra la influencia que puede llegar a tener un cura entre la gente. Éste arenga a la población para linchar a un grupo de estudiantes, a quienes confunde como socialistas y, por ende, un peligro para su status social. Felipe Cazals se erigió como un gran director de cine con este filme.
EL CRIMEN DEL PADRE AMARO
Un cura interpretado por Gael García Bernal, abusaba sexualmente de una feligresa, a quien incluso le ponía la manta de la Virgen. Los conservadores alegaron que era indigno y algunos cines decían al público que la función ya no tenía lugares, para sacarla lo más pronto posible. Al final se erigió como la más taquillera del cine mexicano con cerca de 6 millones de espectadores en 2002, cuando la estrenaron.
Fue dirigida por Carlos Carrera y basada en una novela del portugués Eça de Queirós.