El británico Craig Lynch, 28 años, se fugó de la prisión de Hoellesley Bay, en Suffolk, dejando en evidencia las vulnerables medidas de seguridad de los penales británicos.
Aunque su fuga sorprendió en su momento a la opinión pública, hoy aún se sigue hablando del caso, ya que el joven que debería de pagar una pena de siete años por un delito continuado de robo, no ha perdido el tiempo para burlarse de las autoridades y desafiarlas a que den con su paradero, al actualizar frecuentemente su perfil de Facebook, red social en la que cuenta con poco más de 42 mil fans, quienes todos los días siguen las aventuras del prófugo más conocido del Reino Unido:
"Hemos hablado con Facebook y tratamos se seguirle el rastro con la información que tenemos, pero también estamos pidiendo ayuda de la ciudadanía. Obviamente nos tomamos lo que él dice en Facebook con sumo cuidado, porque ahora sabe que se está leyendo lo que escribe", señaló un portavoz de la policía de Suffolk sobre el prófugo, quien en una de sus más recientes actualizaciones, dejó ver a sus amigos, que la policía estaría muy cerca de dar con su paradero por lo que sus días en libertad estarían por llegar a su fin:
"Qué puedo decir, amigos. La carrera está cerca de su final. Perdonen que se hayan tenido que enterar de esta manera. Algunos de ustedes seguro que toman como una ofensa que no se los haya dicho personalmente. Pero ya me conocen, no confío en nadie. Es la única manera", escribió Lynch.
En caso de que la policía dé con Lynch, será el tercer caso relacionado a un arresto por el uso de redes sociales o nuevas tecnologías, tal y como sucedió como Maxi Sopo y otro delincuente en Canadá.
