Arizona promulgó ayer la Ley contra inmigrantes ilegales más dura de Estados Unidos, que convierte en un delito estatal el encontrarse sin documentos en Estados Unidos y obliga a policías locales a verificar la situación migratoria de cualquier persona.
Arizona promulgó ayer la Ley contra inmigrantes ilegales más dura de Estados Unidos, que convierte en un delito estatal el encontrarse sin documentos en Estados Unidos y obliga a policías locales a verificar la situación migratoria de cualquier persona.
La gobernadora de Arizona, Jan Brewer, firmó ayer la nueva Ley que entrará en vigor en tres meses.
La firma provocó que el presidente Barack Obama entrara en el debate, calificando la Ley como "irresponsable" y "mal encaminada". Obama dijo que esa Ley señala la urgencia de una reforma migratoria para legalizar a indocumentados.
La nueva legislación contempla hasta seis meses de prisión a migrantes capturados en Arizona sin documentos y propone el pago de 2 mil 500 dólares de multa.
La nueva legislación convierte a Arizona en el primer estado que obliga a policías locales a interrogar a cualquier persona sobre su situación migratoria, tan sólo por la sospecha de que esté ilegalmente en el país.
Se calcula que en Arizona hay unos 460 mil inmigrantes ilegales y es el principal cruce de indocumentados desde México.
Durante las últimas semanas, organizaciones de defensa de migrantes en Estados Unidos, así como el Gobierno y el Congreso de México hicieron campaña contra la promulgación de la Ley, e incluso pidieron a Brewer que la vetara.
Mientras que la gobernadora Brewer consideró que la nueva Ley "protege a todos los ciudadanos de Arizona'', Obama advirtió que la medida podría violar los derechos civiles de la gente, y ordenó al Departamento de Justicia a analizar la medida para determinar si es legal.