En protesta por el resultado de un dictamen legista, un grupo de personas se manifestó frente a Palacio de Gobierno junto con los restos de un joven de 15 años de edad en un ataúd, el cual pereció en esta capital veracruzana.
Los familiares del joven Eugenio León Fernández Martínez, cuyo cuerpo metido en un ataúd acompañó la protesta, denunciaron que el reporte del forense determinó que se había suicidado, aun y cuando presentaba diversas heridas y mutilaciones en el cuerpo.
Ante ello, decidieron bloquear por la mañana la avenida Arco Sur (una de las más importantes de esta capital) y, posteriormente, la céntrica calle de Enríquez, frente a Palacio de Gobierno, donde exigieron una investigación y castigar a cuatro supuestos responsables del crimen.
La hermana del menor, Bárbara Fernández, denunció que en el dictamen legista jamás incluyeron las torturas y mutilaciones que fue objeto Eugenio a manos de presuntos pandilleros.
"Dicen que posiblemente fue un suicidio, pero no dice que no tenía una oreja, que le cortaron toda su pancita, se la rallaron, que todo por atrás lo cortaron y en la cabeza tenía un fierro, que toda su cara estaba reventada, que su nariz estaba rota, que le echaron animales que le mordieron su brazo, todo su cuerpo está golpeado, nada más que estaba ahorcado", relató.
Por si no fuera suficiente, explicó, los cuatro principales sospechosos de la muerte del joven fueron puestos en libertad, pues la autoridad consideró que no había delito que perseguir luego del dictamen forense donde se señala que el occiso se suicidó.
"¿No dice el gobernador que en Veracruz los niños no se tocan?, a este niño no sólo lo tocaron, sino que además lo mutilaron; que se agarre a los culpables porque se había detenido a 4 y los dejaron salir", acusó.
