IMSS. Además del desabasto de medicamento, los derechohabientes hacen largas filas en la farmacia de la 66 hasta por más de una hora. EL SIGLO DE TORREÓN / SERGIO REYES
La semana pasada, Rita fue dos veces a la farmacia de la Clínica 16 del IMSS y en ninguna ocasión encontró la medicina que la recetó el doctor. También fue el lunes y ayer martes, pero nada.
Para María Guadalupe Robles fue decepcionante acudir a la farmacia de la Clínica de Especialidades número 71, y no encontrar la medicina para su hijo, quien perdió un riñón y necesita estar bajo estricto control médico.
En la Clínica 66, los derechohabientes también se quejan porque no pueden surtir sus recetas. Y es que las farmacias de las Unidades de Medicina Familiar (UFM) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), tienen algo en común: el desabasto de medicamento.
Seis horas viajó María Guadalupe Robles Correa para que su hijo acudiera a consulta en la Unidad de Medicina de Alta Especialidad (UMAE), número 71. El doctor le recetó al pequeño una suspensión porque le detectó una infección renal, pero no la tenían en farmacia.
"Nosotros vivimos en Zacatecas pero como allá no hay hospitales donde puedan darle la atención necesaria a mi hijo, pues viajamos hasta Torreón. El doctor sí lo vio, pero nos vamos con las manos vacías porque no hay medicamento; ya gastamos en el viaje y no podemos regresar mañana, así que a ver cómo le hago", comenta María Guadalupe.
Rita se enfada cuando comenta que la semana pasada fue dos veces a la farmacia de la Clínica 16, y en ninguna ocasión pudo surtir su receta.
"Esta semana ya van otras dos vueltas que doy y nada. Soy hipertensa y no puedo dejar de tomar el amlodipino, pero no lo tienen".
Desde hace tres meses, Antonia Zapata Rodríguez no toma su medicamento como es debido porque tampoco hay en la farmacia de la 16.
"Tengo problemas del corazón y además soy hipertensa.
En la Clínica 66 del IMSS, se repite la misma historia. Silvia Moreno busca la oxcarbazepina desde noviembre.
En las farmacias particulares ese medicamento cuesta 250 pesos, y los pacientes que lo requieren no pueden suspenderlo por ningún motivo, sin embargo.
En la 66 hay un área de Atención al Derechohabiente para poner quejas por el desabasto, pero el lugar siempre está vacío.
Malestar
Algunas quejas de los derechohabientes:
⇒ No hay medicamento.
⇒ En la 16 hacen fila hasta por más de una hora.
⇒ El área de atención al derechohabiente no funciona como es debido.