El gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto, indicó que ante la efervescencia política que despierta la elección en la entidad en el 2011, en la que se renovará la gubernatura, se buscará "blindar" al estado para que "manos ajenas a los intereses de los mexiquenses se vean volcadas" en el proceso electoral.
En entrevista posterior a la inauguración de la clínica de consulta externa Issemym "Nicolás Bravo", Bicentenario, el mandatario estatal se refirió a las declaraciones del senador panista Santiago Creel, quien se pronunció a favor de una alianza opositora al PRI en la entidad para acabar con el autoritarismo que impera desde hace más de 80 años.
"Es una definición exclusiva de los mexiquense o sea que todo aquel que no tenga, ni participación, ni viva siquiera en el estado, ni esté en la dinámica del estado, pues ojalá y se abstenga de participar, este será un proceso y una decisión exclusivamente de los mexiquenses", expresó.
Peña Nieto consideró que actores políticos que no tengan relación alguna con el estado de México deben quedarse al margen del proceso electoral que se desarrollará en la entidad más poblada del país el próximo año.
"Me parece que ya estamos observando definiciones, señalamientos, posicionamientos de cara a la elección del estado de México, me queda muy claro que será una elección que despierte una gran efervescencia política, que despierte también la participación de grupos que son totalmente ajenos al estado de México, pero que quieren venir a hacer aquí, causar remolinos", apuntó.
Sin embargo, el gobernador mexiquense no opinó sobre una posible coalición opositora PRD-PAN en el estado de México.
"Parece que la elección del estado de México el próximo año tendrá que ser una definición única y exclusiva de los mexiquenses, a partir de lo que juzguen sean los mejores candidatos, los partidos políticos están en su proceso para saber quienes serán. Hay quienes pretenden hacer colisión de fuerzas, porque es así como suponen, tienen más fuerza", manifestó.
El fin de semana pasado senadores panistas y perredistas, así como dirigentes de esos institutos políticos coincidieron en que una alianza PAN-PRD podría acabar con más de 80 años de gobierno del PRI en la entidad, en la que aseguraron hay un rezago muy marcado en la prestación de servicios, además de un incremento de violencia y corrupción.
Durante las campañas que se llevaron a cabo en Oaxaca, Veracruz, Puebla y Durango, entre otras entidades, el gobernador Enrique Peña Nieto, acudió a apoyar a los candidatos priístas a las gubernaturas, visitas que fueron criticadas por panistas y perredistas.