Varios días antes de la explosión de la plataforma en el Golfo de México que causó la fuga de petróleo, funcionarios de British Petroleum (BP) eligieron, en parte por razones económicas, sellar el pozo con una cubierta pese a que era la opción de más alto riesgo.
Así lo publicó este día The New York Times, citando un documento de BP que señalaba su preocupación de que el cemento usado alrededor de la cubierta de la tubería no sellara en forma apropiada y permitiera la salida de gases hasta la boca del pozo, donde un solo sello serviría como barrera.
El Times explicó, con base en el documento otorgado al diario por un investigador del Congreso, que el uso de un tipo diferente de revestimiento proporcionaría dos barreras.
Trabajadores de la plataforma y funcionarios de la compañía han dicho que horas antes de la explosión, los gases se escapaban a través del cemento, trabajo que había sido realizado por el contratista de servicios petroleros, Halliburton.
Los investigadores han afirmado que estas fugas fueron la causa probable de la explosión.
La decisión adoptada por la empresa fue descrito en el documento como el 'un caso de mejor resultado económico'.
Sin embargo, esto también trajo riesgos más allá de la posibles fugas de gas, incluida la posibilidad de que se tuvieran que realizar trabajos adicionales necesarios o que no habría retrasos, explicó el documento.
Andrew Gowers, un portavoz de BP, dijo que no había estándar en la industria para cubiertas usadas en pozos en aguas profundas y que Deepwater Horizon no hizo nada inusual.
Un miembro de la comisión federal que investiga la causa de la explosión, dijo que antes del estallido la compañía tenía la esperanza de utilizar la plataforma para perforar otro pozo a principios de marzo.