La actualización en la ficha de Catastro de una de las propiedades comparadas para la Gran Plaza, que elevó casi cuatro veces su valor, se hizo sólo con una observación desde afuera, pues los inspectores ni siquiera entraron a la construcción.
Al explicar por qué un predio ubicado en la esquina de Matamoros y Galeana aumentó su valor de 665 mil 652 pesos en mayo a 2 millones 335 mil pesos en septiembre, el tesorero Pablo Chávez Rossique dijo que empleados del Catastro realizaron una inspección para determinar el valor poco antes de su demolición, en mayo.
Sin embargo, Chávez Rossique admitió que los dueños del predio impidieron la entrada de los inspectores, que se limitaron a hacer la inspección “en la banqueta”, con lo que determinaron que la construcción valía más de dos millones de pesos.
El tesorero dijo que los inspectores consideraron las condiciones generales del inmueble, pero la ficha del Catastro en septiembre describe la propiedad como de cuatro pisos, cuando tenía dos, y de fachada “muy lujosa”, cuando en una ficha anterior aparecía como de dos pisos y fachada sencilla.
Chávez Rossique tampoco explicó por qué la nueva ficha describe detalles sólo visibles en el interior, como piso de mármol y granito, más de dos baños o paredes de tapiz y yeso.
La propiedad fue comprada por el Municipio en 7.9 millones de pesos.
