Las disposiciones y nuevos lineamientos expresados por las secretarías de Educación Pública y Salud a nivel federal, que dan marcha atrás a los programas de prohibición de venta comida chatarra y bebidas endulzantes en planteles escolares de educación básica, "en Colima no será acatada, por significar un retroceso", afirmó el diputado local, Enrique Rojas Orozco.
Dijo que Colima desde hace varios años se viene aplicando estrictamente la Ley de Educación Pública, en la que se prohíbe la venta de ese tipo de alimentos en planteles escolares.
El legislador apuntó que afortunadamente en Colima esta situación no se presentará, ya que para el regreso a clases, este próximo lunes 23 de agosto, se seguirán implementando los lineamientos establecidos en la alimentación de los menores.
Reiteró que la entidad ocupa los primeros lugares tanto en materia infantil como en lo general de todos los ciudadanos en obesidad y sobre peso.
"Creo que sí es alarmante, porque de repente hay datos contradictorios a nivel federal. En Colima no se debe bajar la guardia, debemos estar muy atentos, porque debemos de seguir trabajando para que aprendamos a comer más sano, para que podamos concientizar a los ciudadanos y de esa manera eduquemos muy bien a nuestros hijos y jóvenes en qué comer".
Por otra parte, el secretario de Salud y Bienestar Social del Gobierno del Estado, Agustín Lara Esqueda, advirtió que el sobrepeso y la obesidad podrían causar una disminución en la esperanza de vida -que es de 75 años-, toda vez que los niños que padecen estos problemas de salud se exponen a riesgos de enfermedades crónicas, lo que podría provocar infartos y muertes prematuras entre la población.
Señaló que en el estado se pretende lograr que el 90 por ciento de la población escolar que presenta problemas de sobrepeso y obesidad, cambie de hábitos alimenticios, realice actividad física al menos una vez por semana y reciba atención integral, así como se brinde educación nutricional al 85 por ciento de las madres de niños en educación primaria.
El titular de la Secretaría de Salud indicó que los niños o las personas en general que tienen un sobrepeso de 25 a 29 kilos, duplican el riesgo de contraer la diabetes; las que son obesas, triplican el riesgo y las que registran obesidad mórbida, tienen seis veces más riesgo de padecer esta enfermedad.
Agregó que actualmente se registra la presencia la diabetes en niños y en adolescentes. "Hoy el peso mata", expresó el funcionario estatal al abundar que, de acuerdo a estudios científicos, el sobrepeso disminuye tres años de vida y la obesidad siete.
Finalmente, Lara Esqueda señaló que muchos padres de familia no asumen la responsabilidad de enseñar a sus hijos a comer sanamente y recordó que en prevalencia de obesidad en adolescentes, el estado de Colima se ubica en el lugar 12 para las mujeres con un 19 por ciento y en el sitio 10 para los hombres con un 10 por ciento.
