México, Df.- El procurador de Justicia del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, desestimó el dicho de Carlos Cázares Ocaña, gerente del bar Bar, quien aseguró en su declaración preparatoria que la esposa de Salvador Cabañas, María Alonso, fue quien intentó ocultar que la agresión fue al interior del antro, el pasado 25 de enero, para evitar escándalos con la prensa.
Mencionó que ese dicho no cambia la acusación en contra del empleado, quien se encuentra interno en el Reclusorio Sur, y está bajo proceso en el Juzgado 30 Penal por el delito de coparticipación en homicidio calificado en grado de tentativa contra el americanista, delito considerado como grave.
"Ese es un argumento que se contrapone con las constancias que tenemos; sabemos que es un ejercicio de la defensa", refirió. Lo que la autoridad deberá hacer, dijo, es que por medio del Ministerio Público robustecer y adicionar elementos de prueba para dar soporte a la acusación final.
Los seis empleados del bar Bar interpusieron una queja ante la CDHDF por retrasar su salida de prisión.