En el futbol mexicano han militado porteros de Argentina, Colombia, Uruguay, Paraguay, Perú, Polonia, Suiza y Rusia, pero brasileños han sido contados, "sobran los dedos de la mano" para nombrarlos. Brasil es una cantera inagotable de jugadores, pero sus arqueros de trascendencia han sido pocos.
En el Mundial de México 70 el "Talón de Aquiles" del Scratch du Oro brasileño fue su guardameta Félix, y a los cariocas les hubiera haber gustado tener entre sus filas a Ignacio "Cuate'' Calderón, en ese entonces portero titular de la Selección de México.
No debemos olvidar que en el año de 2005 el Santos de Brasil se interesó por los servicios de Oswaldo Sánchez, antes de que llegara al Santos Laguna, y en el 2006 el club brasileño Corinthians le hizo una oferta para que formara parte de sus filas, pero no aceptó ambas propuestas y posteriormente se decidió por venir a los Guerreros.
En Brasil hizo historia el gran guardameta uruguayo Ladislao Mazurkiewicz con el Club Atlético Mineiro, además de haber asistido a los Mundiales de México 70 y Alemania 74. Desde hace años es entrenador de porteros de la selección nacional de su país.
En la década de los años sesentas vinieron al futbol mexicano tres porteros brasileños, varias decenas de delanteros y medio volantes cariocas, los cuales eran muy solicitados por los equipos de nuestro país.
Basta recordar que el América en una temporada, en los inicios de la década de los años sesentas llegó a tener en su cuadro a cuatro brasileños: Moacyr Dos Santos, Urubuatao Calvo, Ney Blanco y José Alvez Dos Santos, "Zague", padre Luis Roberto Alvez, "Zaguinho".
El desaparecido equipo Oro de Guadalajara consiguió el único título de su historia con cuatro jugadores brasileños: el defensa central Adhemar Barcello, el medio volante Nicola Gravina, la mancuerna goleadora de Manuel Tavares Necco y Amaury Epaminondas.
En esa legión de jugadores amazónicos llegaron tres porteros, el primero de ellos fue Carlos Pierin Lalá, quien militó de 1961 a 1963 en el Atlas de Guadalajara; el segundo fue Albertinho, que llegó para el desaparecido Nacional de Guadalajara en 1961.
El tercero y último portero brasileño fue Amaury Fonseca, contratado por Monterrey en 1962.
Carlos Pierin Lala nada más milió en el Atlas de Guadalajara, el gigantón Albertinho jugó con los Pericos del Nacional dos temporadas y después fue transferido al Zacatepec, cuando los Cañeros regresaron de su primer descenso en el campeonato 63-64.
Amaury Fonseca del Monterrey pasó al Veracruz, cuando los Tiburones Rojos regresaron al máximo circuito del futbol mexicano en 1964, después de varios años de ausencia.
Han pasado más de 40 años desde que militaron esos tres arqueros brasileños en nuestro país, y no ha vuelto a venir otro más, ya que Brasil no es un país exportador de porteros al nivel de Argentina y otras naciones sudamericanas.
¡Hasta la próxima!
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