Así se llamó a Pedro Nájera, medio volante del América en las décadas de los años cincuentas y sesentas, por su capacidad física para recorrer la cancha, defender y atacar. Formó una de las mejores medias en la Selección Nacional con Raúl Cárdenas, habiendo asistido a los Mundiales de Suiza 1954, Suecia 1958 y Chile 1962.
Fue el periodista Antonio Huerta quien en su columna Indiscreciones de Dartañán lo bautizó con este apodo al ver cómo cubría la media cancha del América, equipo con el que fue titular indiscutible durante 17 años, algo que ningún otro jugador ha logrado con las Águilas de Coapa.
Pedro Nájera llegó de 18 años de edad al América y lo debutó en 1951 el técnico húngaro Jorge Orth en un partido contra el Tampico en el puerto jaibo, desafortunadamente salió lesionado al minuto ocho y debió parar ocho meses, al término de los cuales reapareció para dar inicio a una de las carreras más brillantes en el futbol mexicano, tanto con el América como en la Selección Nacional.
Fue el técnico Octavio Vial quien lo cambió de posición, de interior izquierdo a medio volante por ese lado en la temporada 1952. En ese entonces el América no era lo que ahora es, los jugadores batallaban para viajar y cobrar su sueldo, hasta que se hizo cargo de los entonces cremas don Emilio Azcárraga Milmo mejoraron las condiciones del club.
Sus primeros compañeros en el América fueron los guardametas Walter Ormeño, Manuel Camacho, Enrique Huerta y Humberto "El Rojo'' Gama, los defensas Manolo Canibe, Juan Arrieta, Juan Bosco, y Manuel Lemus, los delanteros José Buendía, Eduardo Palmer y Carlos Calderón de la Barca, los argentinos Fijel, José Santiago y Héctor Ferrari.
Después llegaron Alfonso Portugal, Antonio "El Güero" Jaso, José "El Pepín'' González, Alfredo del Águila, Fernando "El Perro'' Cuenca, Martín Ibarreche, el tico Juan Soto, los brasileños Moacyr dos Santos, Ney Blanco de Oliveira, Urubuatao Calvo, Luis Juracy, José Álvez dos Santos "Zague'' y el curazaleño Ronald Martell.
"El Siete Pulmones'' fue seleccionado nacional en innumerables ocasiones, asistió al Mundial de Suiza en 1954, en Suecia 1958 no pudo jugar por estar lesionado y en el de Chile 1962 tuvo una destacada actuación en la media cancha al lado de Raúl Cárdenas.
A su retiro de jugador activo se incorporó al cuerpo técnico del América y de la Selección Nacional como preparador físico, habiendo asistido con este cargo al Mundial de México 1970 y Argentina 1978, por lo que también tiene en su haber cinco Copas del Mundo, tres como jugador y dos como preparador.
Actualmente está retirado del mundo del futbol y radica en la ciudad de Cuernavaca en compañía de su esposa, con quien lleva un feliz matrimonio de 58 años.
Pedro Nájera ha sido un ejemplo único para varias generaciones de lo que debe ser un futbolista profesional, jugó en un solo equipo durante su carrera, con un "amor a la camiseta'' que pocos jugadores han tenido en el balompié mexicano, basta decir que en la organización del América estuvo más de 30 años.
¡Hasta la próxima!
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