El Infonavit redujo sus metas para el presente año debido a que no cumplió con lo programado en 2009, pues sólo se llegó al 80 por ciento, y como efecto habrá una reducción de mil viviendas en 2010, afirmó el presidente de la Cámara Nacional de Desarrolladores de Vivienda, Raúl Franco Garvalena.
Dijo que este año se redujo lo programado a 6 mil 500 viviendas de interés social y la demanda sigue existiendo; sin embargo, los esquemas y la disponibilidad económica no están dados para que esas metas se cumplan e incluso se puedan incrementar.
Detalló que donde hubo una mayor repercusión es en lo relativo a vivienda económica y tradicional para trabajadores de bajo ingreso y cuyo valor es de 210 mil y 255 mil pesos, respectivamente.
El déficit es muy amplio y la demanda es alta comparada con la producción; es desproporcionada debido a que las condiciones que existen en el país no incentivan al desarrollo de vivienda. Aun cuando hay demanda, los trabajadores no pueden acceder a los créditos.
Sin embargo, los desarrolladores no sólo a nivel local sino a nivel nacional están enfocados a satisfacer la demanda de vivienda, informó.
Afirmó que al haber la sombra del desempleo muchos trabajadores que califican para un crédito optaron por esperar porque no tenían la seguridad de permanecer en su empleo.
Aunado a las instituciones que modificaron sus esquemas de crédito al no tener la certeza de la recuperación lo que hicieron el año pasado fue ser más selectivos, se redujo el número de derechoabientes para no aumentar su cartera vencida.
Para 2010 como estrategia de compensación las instituciones premian el ahorro, lo que quiere decir que los adquirentes hacen una aportación inicial para tratar de privilegiar el ahorro.
Otro tema que preocupa son los incrementos que se dan y que repercuten en el precio de las viviendas; "cuando la casa es de un nivel considerable lo que hacemos es que las edificaciones sean de menos metros de construcción y de terreno".