Los matrimonios entre personas del mismo sexo y las adopciones a las que tienen derecho esas parejas son una falsificación, una imitación y un camino que no llevará a esos individuos a una realización personal, acusaron ayer monseñor Elio Sgreccia, presidente emérito de la Pontificia Academia para la Vida del Vaticano, y el sacerdote Gonzalo Miranda, profesor de bioética de la Universidad Regina Apostolorum de la Santa Sede.
Ambos prelados dijeron que las uniones entre personas del mismo sexo van contra la naturaleza, mientras que la adopción no se puede considerar una paternidad, "sino un sucedáneo que le puede hacer daño al niño, contra el que se comete una grave injusticia, pues él no se puede pronunciar", agregó Gonzalo Miranda.
El profesor de bioética de la Universidad Regina Apostolorum dijo que en ese tipo de temas, "lo menos que pueden hacer las autoridades es pedir la opinión de la gente, porque son asuntos que afectan a todos". Luego agregó: "Una relación entre homosexuales es como tomar un café descafeinado, que no te despierta". Aseguró que una persona con preferencias sexuales por gente de su mismo sexo sufre mucho y necesita comprensión.
"Lo que acaba de ocurrir en California es muy significativo. En dos ocasiones la gente se expresó contra el reconocimiento jurídico del matrimonio homosexual y por dos veces un juez cambió la votación popular por una sentencia. En México no conozco bien el mecanismo que se siguió, pero tampoco hubo un referéndum o consulta popular", acusó.
Monseñor Elio Sgreccia y el sacerdote Gonzalo Miranda se encuentran en México en donde a lo largo de la semana han participado en una serie de jornadas académicas que conmemoran los 20 años de la fundación de la Facultad de Bioética en la Universidad Anáhuac.
Ayer, los prelados encabezaron una conferencia de prensa en el campus de la Universidad Anáhuac de Huixquilucan, Estado de México, donde los discursos se orientaron a criticar y condenar dichas reformas.
