Consecuencias. Años atrás se registraban muertes por picadura de alacrán a causa de la ignorancia en las comunidades. EL SIGLO DE DURANGO
Los remedios caseros han truncado la atención oportuna ante picaduras de alacranes; en años anteriores la negligencia ha cobrado vidas en las zonas rurales.
COMPORTAMIENTO Rocío Segura, encargada del departamento de Vectores y Zoonosis de Servicios de Salud Durango (SSD), destaca que en las zonas rurales, en primera instancia, aún se utilizan remedios caseros y creen en mitos respecto del efecto y curación de las picaduras de alacrán.
Escupirle al animal que agredió o matarlo, hervir las heces fecales y tomar el jugo y beber leche son creencias antiguas que perduran en muchas regiones.
"A veces las personas piensan que a ellos no les hacen los alacranes, pero lo que no saben es que les picó uno no tóxico", aclaró.
Los alacranes de color claro, de la especia sufusus-sufusus, son los más tóxicos, y si de tamaño se trata, los más pequeños son los más peligrosos.
La doctora recomienda que ante cualquier indicio de picadura se acuda a los centros de salud para recibir el faboterápico (suero).
Dolor intenso, sensación de ardor y quemadura o como si trajeran pelos en la garganta, adormecimiento, comezón en ojos y nariz y salivación excesiva son los efectos del veneno.
El malestar depende de las actividades del animal con anterioridad, si picó hace un día o una semana, qué ha comido y si ha tomado agua influye. Los alacranes son ciegos y atacan cuando se sienten amenazados.
ATENCIÓN
La SSD ha registrado mil 46 picaduras de alacrán en el estado al avance del año que han requerido 2 mil 433 frascos de faboterápico.
La sustancia "es de las mejores del mundo, de alta calidad, y muy cara también"; el producto no provoca reacciones secundarias porque es un suero purificado, explicó Segura.
Los municipios con mayor incidencia son Durango, Vicente Guerrero, Nombre de Dios y Mezquital.
En comparación con el año pasado, las agresiones de alacranes no se han incrementado; en temporada de calor es normal que se disparen los ataques.
En 2009 se registraron 6 mil 579 incidentes y si el índice se mantiene como hasta ahora el año cerrará con el mismo promedio.