Se descarta. José Ramón Cossío Díaz renunció a su aspiración por presidir la SCJN.
El ministro José Ramón Cossío renunció a su aspiración, trabajada durante años, de llegar a la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), porque, aseguró, ante la gravedad de los problemas de inseguridad y las amenazas a los derechos fundamentales que se viven en el país, prefiere dedicarse de tiempo completo a la defensa de sus ideales.
Cossío es ubicado en el plano jurídico como un ministro liberal, protector de los derechos fundamentales, que llegó a refrescar y a innovar en el máximo tribunal a partir de diciembre de 2003. Pero que también ha asumido posturas ambivalentes en los juicios en los que están en juego intereses del gobierno o de sectores poderosos.
En un hecho que rompió con una tradición de cabildear, ganar o perder en privado, en las pláticas en corto y por separado, los apoyos de los ministros de la Corte rumbo al máximo sitial del Poder Judicial, Cossío oficializó ayer su renuncia a esta aspiración mediante una carta.
La decisión de Cossío deja en suspenso, dicen, el proceso de selección de quien asumirá la presidencia de la Corte por cuatro años, a partir del primer día hábil de 2011, en sustitución del ministro Guillermo Ortiz.
Rumbo al proceso de sucesión, Cossío competía con Juan Silva Meza, un ministro que ha destacado por su trayectoria garantista y protector de los derechos fundamentales.
Con la decisión de Cossío se generó un ambiente de incertidumbre en la Corte, porque se desconoce si el ministro negoció su apoyo a otro candidato que arme un bloque que, nuevamente, se oponga a que Silva llegue a la presidencia o si se sumará a Silva.
