Internos del penal de Pacho Viejo, asentado a 15 minutos de esta capital veracruzana, se amotinaron y mantuvieron como rehenes a un cocinero y a una secretaria en protesta por la mala alimentación que reciben.
De acuerdo con reportes policiacos, a las 13:30 horas de hoy cerca de 350 reos decidieron rebelarse debido a que les disminuyeron las cantidades de comida bajo el argumento que el gobierno estatal carece de recursos financieros.
Familiares de los reos denunciaron que les quitaron de su dieta la tortilla y pan, por lo que decidieron amotinarse para exigir mejores condiciones alimentarias.
Al penal, el segundo más grande del sistema penitenciario, arribaron elementos del Ejército mexicano y de la Secretaría de Seguridad Pública, quienes rodearon todo el perímetro para evitar una fuga.
Sin embargo, el director del penal Arturo Lara, calificó el conflicto como una simple "riña" que fue controlada en una hora después y atribuyó el problema a viejas rencillas entre los reos.
El funcionario aseguró que no hubo personas fallecidas y sólo algunos con lesiones leves, los cuales fueron atendidos en la misma área de enfermería del penal.