Rebelión. Un policía de los 800 sublevados, alza las manos mientras estalla una bomba de gas lacrimógeno en Ecuador.
Ecuador sufrió ayer un intento de golpe de Estado, cuando 800 policías sublevados secuestraron al presidente Rafael Correa en la salida de un hospital. Inmediatamente se declaró a Ecuador Estado de excepción por la situación de su presidente.
Correa permaneció secuestrado por espacio de diez horas después de sufrir una agresión de policías sublevados.
La principal protesta de los sublevados son la baja en las prestaciones. Nueve horas después del secuestro la escolta militar se enfrentó a tiros con los sublevados ensombreciendo la situación, finalmente se logró rescatar al presidente.
Tras casi 35 minutos de intercambio de disparos que dejó por lo menos un herido, los militares evacuaron a Correa en una camioneta que partió a toda velocidad en medio de fuerte resguardo militar.
Después del operativo Correa llegó al Palacio de Carondelet, en donde dirigió un discurso a una multitud de seguidores que se mantuvieron horas concentrados en el lugar y lo vitorearon cuando apareció en el balcón que da a la plaza.
El ministro de Seguridad Interna y Externa, Miguel Carvajal, dijo en rueda de prensa que "la sublevación ha dejado un muerto y varios heridos" en los alrededores del hospital policial donde está el mandatario. No dio otros detalles.
El presidente calificó la revuelta policial como "un intento de golpe de Estado" y denunció que grupos rebeldes y opositores venían preparando la "conspiración" desde "hace mucho tiempo".
Medio centenar de opositores al Gobierno irrumpieron violentamente en las instalaciones de la televisora estatal, en donde se vio que quebraron una puerta de cristal y poco después debió suspender temporalmente sus transmisiones regulares.
A inmediaciones del hospital policial se mantenían congregados cientos de simpatizantes de Correa, igual que en la plaza frente al Palacio de Carondelet, la sede del Ejecutivo. Policías mantenían barricadas y disparando gases lacrimógenos, impedían que manifestantes, que lanzaban piedras y palos, se acercaran al nosocomio.
El general de policía Euclides Mantilla, que intenta mediar en la situación, dijo a periodistas que "no quiero que haya descontrol, que vaya haber gente que arriesgue demasiado".
En declaraciones a la estatal EcuadorTv, Correa expresó que "yo salgo de aquí (del hospital) como presidente o como cadáver, pero no voy a perder mi dignidad. Todo es manipulación, todo es desinformación".
El gobernante dijo que han llegado tres comisiones de los insubordinados a intentar negociar pero los rechazó porque dijo que no aceptará ningún condicionamiento ante las acciones y violaciones que se han registrado.
El director del hospital de policía, César Carrión, afirmó a radio Sonorama que el presidente "está con su seguridad, en ningún momento está secuestrado, se le ha prestado el auxilio médico".
"Llegó por los gases que recibió en el regimiento (policial)", añadió.
Poco después de haber resultado intoxicado al explotar una bomba lacrimógena a escasa distancia de su cabeza cuando intentaba dialogar con los policías alzados, Correa subió a una ventana del cuartel donde se produjo la revuelta y gritó: "si quieren matar al presidente, mátenme... pero este presidente seguirá haciendo lo que tiene que hacer".
El alcalde de Quito, Augusto Barrera, había dicho que el aeropuerto sería abierto pero una mujer que se identificó únicamente como Carolina que respondió el teléfono de la terminal aérea dijo que "no está reabierto y no tenemos una estimación de cuándo se abrirá". El Gobierno decretó el Estado de Excepción y Carvajal, aclaró que la insubordinación no es de toda la policía. Algunos jefes policiales expresaron públicamente su obediencia a la autoridad.
También el jefe del comando conjunto de las Fuerzas Armadas, general Ernesto González, manifestó su adhesión a la institucionalidad al afirmar que representa a "una institución organizada, jerarquizada, subordinada al interés nacional y también subordinada a la autoridad legal, legítimamente constituida".
Aseguró que en medio del Estado de Excepción decretado, las fuerzas armadas resguardarán el orden público, como lo dispone la Ley y especialmente porque la policía no está cumpliendo esa función. Pero expresó que la causa de la crisis "es la probable promulgación de la Ley Orgánica de Servicio Público, para la cual solicitamos sea revisada o dejada sin efecto".
La vicepresidenta del Congreso, Irina Cabezas, señaló que mientras los sublevados no depongan la actitud de rebeldía y Correa no retorne al Palacio de Gobierno, los asambleístas no revisarán la citada Ley, que aún no está vigente.
Los sublevados se tomaron cuarteles policiales en Quito, Guayaquil y otras ciudades, quemaron llantas, lanzaron gases lacrimógenos y cerraron las carreteras de acceso a la capital durante algunas horas, según reportes de las radios y canales de televisión, que mostraron imágenes de los incidentes. Unos 800 policías protagonizaron la protesta en la capital, unos 150 militares de la fuerza aérea bloquearon el aeropuerto de Quito y otros tantos el de Guayaquil aduciendo razones de seguridad. En Ecuador hay cerca de 40,000 policías.
MIGUEL INSULZA
Secretario de
HILLARY CLINTON
Secretaria de Estado de EU
FIDEL CASTRO
Ex presidente cubano
BAN KI-MOON
Secretario general de
Lamenta derramamiento de sangre
Rafael Correa, presidente de Ecuador, lamentó el derramamiento de sangre durante sublevación de policías en el país.
"Se ha derramado sangre ecuatoriana inútilmente" manifestó.
El presidente Correa apareció en el balcón del Palacio Carondolet, tras ser rescatado por militares del hospital en que estaba confinado."Muchas gracias a esos héroes que me acompañaron durante esta dura jornada, a mi guardia personal que fue maltratada", declaró desde el balcón.
"Con ese valor, con esa lealtad, nada ni nadie nos podrá vencer".
Tras el rescate, quedaron heridos cinco elementos de su guardia, pero ningún muerto.
"Jamás cedimos ni aceptamos negociar; nada bajo presión, por el diálogo todo". Correa agradeció además a los miles de compañero que fueron rescatarlo de la Policía.
Agradeció también el apoyo internacional, al presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero, y a los mandatarios de Chile, Argentina, Perú, Colombia, México, entre otros.
A los sublevados, Correa les recriminó la protesta que culminó con su reclusión en el hospital de la Policía.
"Cuando nos dimos cuenta que no pudimos dialogar, nos empezaron a agredir con bombas lacrimógenas, y luego nos secuestraron", comentó. El mandatario ecuatoriano estuvo recluido en el Hospital de la Policía de Ecuador luego de la sublevación de policías y militares registrada esta tarde.
Golpes de Estado
⇒ El más significativo, el 11 de septiembre de 1973. El socialista Salvador Allende fue derrocado por tropas encabezadas por el general Augusto Pinochet.
⇒ El llamado "Carmonazo". El 11 de abril de 2002, una revuelta encabezada por Pedro Carmona Estanga, en Venezuela, sacó del poder al actual presidente Hugo Chávez.
