Daños. En la mayor parte del territorio duranguense se observan daños por las fuertes lluvias.
Localidades del Semidesierto y la Comarca Lagunera que padecían de la escasez de lluvias, ahora requieren apoyos para paliar las afectaciones sufridas por las precipitaciones atípicas que se presentaron en días pasados.
Carreteras con daños parciales, poblados incomunicados por algunos días, daños a cultivos y viviendas inundadas con afectación a enseres, han dejado las lluvias que al parecer se han disipado, aunque las autoridades siguen en alerta, mencionó Jaime Fernández Saracho, secretario de Desarrollo Social del Estado (Sedesoe).
En el caso del poblado 5 de Febrero, prácticamente están controladas las contingencias, aunque no hay que hacer confianza, ya que el pasado martes por la tarde cuando parecía que ya había pasado toda la problemática, por la noche el río creció de manera considerable y rodeó el poblado.
Con la participación de los ciudadanos, personal de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), además de las dependencias de los gobiernos estatal y municipal, se tuvieron que romper y reforzar bordos para poder contrarrestar la corriente del agua que amenazaba con inundar a la población.
Ahí se reforzó con costales llenos de arena todo el perímetro del pueblo, que prácticamente parecía una isla e incluso fue necesario desalojar unas tres viviendas, dada la cantidad de agua que llevaba el Río Tunal.
En los poblados de Contreras, Navacoyan y Montes de Oca, del municipio de la capital del estado, será necesario hacer una evaluación de daños para valorar la afectación a los cultivos, comentó.