David Agüero López ofrecía ayer banderas, uniformes y gorros del Santos Laguna cerca del crucero Cuatrocaminos. Revive la Santosmanía de cara al partido ante América
La santosmanía vive de nuevo un gran momento, en el marco del partido de vuelta entre Santos Laguna y América. Los vendedores de banderas, uniformes, gorros, bandas y paliacates han vuelto a aparecer en los cruceros de las principales arterias.
La afición lagunera vive la euforia de este fenómeno que apareció hace 16 años, cuando los Guerreros calificaron por primera vez a una liguilla, en la temporada 1993-1994, y se ha hecho una costumbre desde entonces, acompañada de la pinta de leyendas en los vidrios de automóviles y camionetas.
Los vendedores de estos artículos hicieron su aparición desde media semana, y aunque hasta ayer las ventas estaban "charras'', esperaban que hoy domingo repunten con la celebración del partido.
David Agüero López, quien desde hace diez años vende los "trajecitos'', camiseta y short, con el diseño del uniforme del equipo de la Comarca, comentó que las ventas no han sido como en otros años, sin embargo, el entusiasmo y la pasión de la gente de la Comarca por su equipo sigue vigente.
El precio de un "trajecito'' se cotiza en 60 ó 70 pesos según el cliente, pues como reza un dicho: "Según el sapo, es la pedrada''. Las banderas grandes valen 80 pesos, la bandera para espejo retrovisor se vendía ayer a 30 pesos. Los gorros altos andaban en 80 pesos, los paliacates a 25 pesos y las bandas a 20 pesos.
Camisetas había de 40, 80 y cien pesos, sin que la oferta rebasara a la demanda.
En las banderas estaban impresas las leyendas: "Yo voy a ser campeón, ¿y tú?" y "Todos unidos ganaremos'', entre otras.
No podían faltar las piñatas con la figura del legendario Guerrerito con los diferentes uniformes del Santos Laguna, las cuales estaban a la venta en las dulcerías del Mercado de Abastos de La Laguna, pues la celebración de un cumpleaños no fue ajena a la santosmanía.
Las calcas estuvieron a la orden del día en diferentes cruceros, una de ellas imprimía la frase "¡Guerreros, quiero ser campeón otra vez!" y "Guerreros 4 Campeón''.
El costo de una calca en los vidrios de un automóvil iba de cinco a diez pesos, según lo manifestado por Jorge Bernal.
La santosmanía también se hizo presente en los lugares de venta de gorditas, burritos y quesadillas. En el negocio ubicado en calle 37 y avenida Presidente Carranza había una lona de color verde en la que se anunciaban los antojitos en mención, enmarcados en un escudo del Santos Laguna.
La afición se preparaba ayer para vivir la gran fiesta de hoy, que será inolvidable.