Momentos de suma importancia se viven actualmente en el seno de Vaqueros Laguna, directiva y cuerpo técnico se reunirán la próxima semana en esta ciudad para tomar decisiones claves en cuanto a la conformación del equipo en 2010. Suplir a Dionys César y reforzar el pitcheo parecen las principales preocupaciones del manager Derek Bryant.
El cuerpo técnico prácticamente está listo con la llegada de Héctor Guerrero, aunque falta un coach más, el cual puede ser instructor de catcheo, para llenar el hueco de José Luis "Chato" Luna. Vaqueros Laguna tiene poco tiempo de trabajar formalmente en el desarrollo de sus prospectos y algunos de ellos deberán dar el "do de pecho" en este 2010, porque estos jóvenes llegarán al equipo grande en posiciones claves.
Nadie duda de las cualidades de Jorge Luis Ibarra, el lanzador zurdo perteneció a los Diamantes de Arizona, pero en los últimos meses vino a menos hasta ser una incógnita, luego de diez triunfos como inicialista en 2010. Baudel Zambrano también ha sido un brazo inconsistente, en temporada regular y en playoff, el sinaloense cuenta con gran talento, el cual se espera vuelva a aparecer, aunque no jugó en la actual Liga Mexicana del Pacífico. Alberto Manrique hoy parece más confiable, mientras que Juan Delgadillo y Víctor Santos lucen como abridores seguros.
En los Olmecas de Tabasco se busca un jugador de cuadro que dé seguridad en segunda base y el campo corto, sin descartar la antesala, como ese garbanzo de a libra que encontraron los Saraperos de Saltillo en Hernando Arredondo. Hoy quizá sea muy temprano pero lo mejor para Vaqueros es tener a otro inicialista extranjero, así lo ideal sea que un importado aporte al equipo todos los días. Dicho lanzador se uniría a Juan Delgadillo y Víctor Santos para dejar dos lugares pendientes en una rotación de cinco.
El beisbol ha sufrido cambios drásticos en los últimos tiempos, las circunstancias así lo obligaron, y sería muy positivo que la rotación de abridores se integrara sólo con cuatro lanzadores. Derek Bryant habla de la reducción del roster, de 27 a 25 peloteros, lo que influye en las posibilidades de tener cerca a los jóvenes valores. En tiempos de bonanza el beisbol se llenó de relevos largos, intermedios, preparadores y cortos, por lo que hoy en día es prácticamente imposible disfrutar de un juego completo, algo muy natural en esta liga hace apenas dos lustros.
A partir de 2010 cada pelotero tendrá un salario acorde a los resultados de su trabajo, por lo que un abridor de cuatro días de descanso sería muy cotizado. Las condiciones económicas han apretado a peloteros y equipos, por lo que al reducir el roster sería muy sano tener abridores de cuatro días de descanso, para conformar el staff con sólo cuatro brazos confiables. No olvidar que Vaqueros Laguna tiene una misión muy complicada en 2010, ya que el equipo dejó un gran sabor de boca entre sus seguidores, al llegar hasta la final de la Zona Norte en 2009.
Mientras tanto, Derek Bryant sabe lo que el equipo pierde con la salida de Dionys César, aunque el timonel guinda tiene plena confianza en el material joven propiedad de la organización. Es un hecho, sin embargo, que las posibilidades de éxito para un equipo se multiplican cuando en el roster se incluyen bastantes peloteros experimentados (no viejos) y de calidad.
Hoy el problema de escasez obliga a las organizaciones a utilizar jóvenes que no están listos, o bien, veteranos ya sin mucha cuerda, pero que por sus muchos años en la Liga Mexicana de Beisbol, son una fuerte carga económica para los equipos.
Claudio_martinez@yahoo.com