Aún después de recibir la medalla de subcampeón, Rubén Omar Romano seguía reclamando a Justino Compeán, presidente de la Femexfut. (Ramón Sotomayor C.)
"Estamos apenados y tristes por no poderle dar a la afición de Torreón ese título, pero deben estar orgullosos del equipo que tienen, de la entrega y de la actitud", fueron las palabras del técnico santista Rubén Omar Romano, al perder una segunda final consecutiva con los Guerreros.
Agregó que lamentan la derrota, en un partido en que el rival aprovechó los errores de su equipo y del arbitraje, aunque reconoció que Monterrey fue un merecido y gran campeón, en una final que pudieron haber definido en Torreón.
"Acá (en la vuelta) en algunos momentos tuvimos el partido controlado, hasta esa falta técnica en ese segundo gol. Desde antes que tiraran el corner, la pelota estaba fuera del círculo, lo reclamamos antes, era inválido. Luego de esa acción, el árbitro se dio cuenta y fue personalmente a verificarlo al siguiente cobro".
Dijo que salió molesto por el arbitraje, por eso fue al final del encuentro a expresar su punto de vista, pero eso no le resta méritos al rival, al que catalogó de un digno campeón y Santos como un excelente contrincante.
"Esa jugada del segundo gol nos sacó de toda concentración, porque en el segundo tiempo no nos habían llegado. Hay que hablar con la directiva, pero la idea es seguir al frente de este equipo".
A diferencia de hace seis meses, de la catastrófica derrota en la capital mexiquense, Romano se mostró tranquilo y advirtió: "el título era para la institución y para la afición, a la cual le pido perdón, disculpas por no poder ganar el campeonato, dimos todo, somos profesionales, porque hasta nos levantamos de una final anterior.
Por último, el estratega albiverde criticó el campo de juego, muy maltratado por los partidos de futbol americano, por lo que no fue digno de una final, por lo que nunca pudieron adaptarse en esa cancha y aunque lo intentaron no les ayudó mucho.
A llorar y después a trabajar
Por su parte, el mandamás santista, Alejandro Irarragorri, dejó en claro que fue un año futbolístico muy importante para la institución, pero que desafortunadamente no pudieron cerrar con un campeonato.
"Luego de sufrir mucho esta noche (ayer), mañana (hoy) nos levantaremos para pensar y soñar en el siguiente torneo. Tener la ventaja era importante, pero en el primer tiempo consentimos y Suazo metió el gol, que condicionó la parte complementaria, lo demás ya es historia.
Reconoció que el rival fue mejor, por lo que merece todo su reconocimiento y una enorme felicitación en este campeonato, por lo que Santos deberá pensar en cómo fortalecerse para encarar con la misma emoción el siguiente torneo.
"Hay que pasar este trago muy amargo, acabamos de perder nuevamente una final, porque el rival a través del futbol nos ganó en la cancha".
Del arbitraje, el presidente lagunero nunca ha hablado, por lo que anoche tampoco lo hizo, pero dijo que Monterrey es un merecido campeón, a pesar de la polémica con el responsable de sancionar las jugadas.
"Es un golpe muy duro, porque fue doble, pero estoy seguro si aprendemos a canalizarlo, saldremos fortalecidos de esto. También para la afición es doloroso, porque fue en una final y ante un rival con el que hay 'pique', estamos con ellos y nuestro corazón está unido".
Irarragorri Gutiérrez, mencionó que Romano está ratificado, más allá de lo que hubiera sucedido, ya que el proyecto deportivo del club albiverde está basado con el actual estratega.
"Hay mucho por hacer, en volver a retomar el camino del trabajo, que es el único que te lleva al éxito".