La confrontación entre grupos políticos pasó a un incremento de acciones violentas a medida que se acercan los comicios que el domingo vivirán 14 estados del país, 12 de ellos para votar por nuevos gobernadores.
En las últimas horas se generaron hechos de violencia en Oaxaca, Veracruz y Sinaloa por enfrentamientos entre militantes de diferentes partidos y coaliciones, en los que se utilizaron machetes y hasta armas de fuego de alto calibre, como los llamados cuernos de chivo, causando la muerte de dos personas y una decena de heridos.
En Sinaloa fue atacado a balazos por desconocidos el consejero ciudadano del V Distrito Electoral, con cabecera en Sinaloa de Leyva, Rosario Alejandro Rivera Bobadilla, cuando transitaba en su vehículo acompañado de su hermano, por el bulevar Juan de Dios Bátiz, en la ciudad de Los Mochis, cabecera de Ahome, al Norte del estado.
En Oaxaca, un grupo de supuestos simpatizantes del Partido Nueva Alianza (Panal) quemó al menos 24 mil boletas electorales en la población de Jalapa del Marqués, y según el presidente del Consejo Distrital respectivo en Ixtepec, porque no se les otorgó una acreditación como representantes de su partido.
Los mismos militantes, encabezados por el hermano del candidato a la alcaldía, Álvaro Flores Carreño, también fueron señalados por realizar bloqueos en la carretera a el Istmo de Tehuantepec, debido a problemas internos en el Panal.
AGARRÓN A MACHETAZOS También en Oaxaca, donde la disputa por puestos de elección se exacerbaron a grados de violencia, candidatos a alcaldes y sus seguidores por la alianza Unidos por la Paz y el Progreso (PAN-PRD), y Por la Transformación de Oaxaca (PRI-PVEM) se liaron a golpes y luego a balazos y machetazos en el municipio indígena chinanteco de San Felipe Usila, al Norte de la entidad. Ahí recibió machetazos en la cabeza el candidato a regidor priista Armando Mendoza Santiago, y el tricolor Enrique Mariano Hipólito fue alcanzado por un balazo en el abdomen.
En Veracruz murió un hombre y seis más resultaron heridos, luego de una riña que terminó a balazos con armas de alto poder entre militantes del PRI y de Convergencia en el municipio de Hueyapan de Ocampo, al Sur del estado. En el lugar murió Lázaro Vázquez Domínguez, quien recibió varios impactos de bala de rifles de asalto M-1 y R-15, así como de pistolas nueve milímetros.
