A salvo. Protección Civil recalcó que de haber golpeado alguna roca a una persona, el desenlace pudo ser fatal. JOSÉ JUAN TORRES QUINTANAR / EL SIGLO DE DURANGO
Una familia fue sorprendida ayer por la madrugada cuando pesadas rocas se impactaron en la pared de su vivienda, en la colonia Gobernadores; la casa se ubica al pie de un cerro.
RIESGO
"Estábamos dormidos cuando empezamos a escuchar ruidos fuertes, las piedras se estaban cayendo", dijo Mauro de la Cruz Alvarado, propietario de la vivienda que fue impactada por el derrumbe.
La casa tiene en la parte trasera una barda de tierra y piedras, parte del cerro.
Explicó que su mayor preocupación era por su hijo pequeño.
Elementos de Protección Civil Municipal se encontraban revisando la zona cuando Mauro de la Cruz pidió ayuda.
Se procedió a apuntalar la barda con palos para evitar otro derrumbe, con la recomendación de no pasar cerca de ella.
El afectado comentó que tenía la intención de edificar su barda de cemento pero necesitaba la colaboración del vecino que vive en el nivel superior, "son de bajos recursos, no tenían para la obra, se tuvieron que ir para buscar trabajo". La vivienda está abandonada.
Son varias las familias que viven en las faldas del cerro; los techos están hechos de cartón y lámina, pocos son de cemento.
PROCESO
José Ángel Aldaba, bombero de Protección Civil, explicó que la labor de las cuadrillas es prestar la ayuda inmediata y canalizar los casos a las autoridades competentes.
En caso de derrumbes se le turna el reporte al DIF y a la Dirección Municipal de Obras Públicas.
En la colonia Benjamín Méndez, también a causa de la humedad, se registró un accidente similar.
Aldaba detalló que ayer se recibieron varios reportes por derrumbes; en ninguno hubo lesionados y no fueron de gravedad.
