MÉXICO, DF.- México, que será sede de la Conferencia Mundial de la Juventud, ha perdido el liderazgo internacional en el tema por la falta de una política pública definida y de avanzada, coincidieron especialistas.
José Antonio Pérez Islas, coordinador del Seminario de Investigación en Juventud de la Universidad Nacional Autónoma de México, recordó que durante el sexenio de José López Portillo se creó el Consejo Nacional de Recursos para la Atención de la Juventud, una figura que al menos en la estructura de atención, se convirtió en eje de política juvenil en América Latina.
"México perdió el liderazgo internacional en el tema de juventud. Cuando creó en los 70 el CREA, revolucionó la política de juventud porque al menos en teoría, se planteaba una atención indisciplinaría y transversal y muchos países de América Latina adoptaron ese tipo de estructura. Ahora no tenemos más que retrocesos", refirió en entrevista.
Alejandro Blancas, de la organización Inicia -que trabaja con jóvenes en el Centro y Sureste mexicano-, encuentra un retroceso en el planteamiento de derechos humanos que se encaminaba en la atención.
"Lo que hemos visto en este sexenio es un retroceso importante en la tendencia que había del reconocimiento de los derechos humanos de los jóvenes. Las políticas públicas carecen de ese enfoque y reducen la visión que tienen de la juventud. Para el Gobierno, los jóvenes sólo son estudiantes, desempleados o delincuentes", dijo.
Ambos especialistas cuestionan que el Instituto Mexicano de la Juventud sea promotor de un evento mundial, cuando en México el tema de juventud sólo es visible cuando detienen o matan a los jóvenes.
"El tema de la juventud se pone en la agenda a partir de la problemática que enfrentan. Primero fueron los Emos, luego el New's Divine, ahora la masacre en Juárez. En el fondo persiste la intolerancia, la criminalización, la represión hacia los jóvenes, se les mira como un problema y no como una posibilidad", sostuvo Blancas, quien actualmente acompaña la defensa de unos jóvenes grafiteros detenidos en San Cristóbal de las Casas.
Para Pérez Islas, además de perder el liderazgo a nivel internacional, en México los jóvenes no merecen una política pública, desde la perspectiva de los gobiernos federal, estatales y locales.
