Rubén Omar Romano e Ignacio Ambriz se saludaron en el partido de ayer en el Alfonso Lastras. (Jammedia)
Al final del encuentro donde Gladiadores de San Luis y Santos Laguna repartieron puntos, el director técnico Rubén Omar Romano expresó que se trató prácticamente de un duelo de liguilla, además de asegurar que el equipo será muy peligroso en la lucha por el campeonato.
"Lo jugamos como teníamos que jugarlo. Creo que hubo dos tiempos; San Luis fue mejor en el primero, especialmente en el arranque, pero nosotros corregimos y fuimos superiores en el segundo tiempo".
Además, rescató que más allá del resultado que siempre se buscó, el punto los mantiene con opciones de terminar en el tercer lugar de la tabla general, situación que no dependerá de nadie sino de ellos mismos.
"(El nivel es) muy bueno, el equipo está muy metido, muy comprometido, y seremos un rival muy peligroso durante la liguilla", aseguró el argentino, y agregó que por supuesto que buscan cerrar en casa las series de la "fiesta grande", por la ventaja que ello conlleva.
"Ahora depende de nosotros ganar nuestro último partido de local para asegurar esa posición. Siempre es ventaja", comentó.
Para finalizar, recalcó que lo que más le gustó fue "el compromiso que están teniendo todos, sabiendo que a veces se puede jugar, a veces se puede golear y a veces hay que jugar y correr... y hoy (ayer) el equipo peleó en toda la cancha".
Por su parte, el arquero Oswaldo Sánchez se manifestó confiado en vencer a Estudiantes Tecos en el último partido de la temporada regular.
También comentó que a veces las ventajas no se pueden mantener, sobre todo "cuando te meten un golazo".
El equipo viajó al término del partido a Torreón, donde se unieron a los festejos del primer aniversario del Territorio Santos Modelo en el Estadio Corona. Hoy tomarán un descanso para retomar los entrenamientos el próximo lunes, en lo que será la última semana del calendario regular.