Foto: LA I
"Si me toca, me tocó", le decía Patricia Ruelas a don Félix, cuando le insistía sobre el peligro que corría en su trabajo como mujer policía, "pero ella siempre quiso ser policía, desde niña, le echaba muchas ganas, desde la Academia, Así era mi hija", dice don Félix, triste, sentado en el sillón de su casa.
No renunció
"Yo le decía, ahora con el problema de los policías (paro de labores), que mejor renunciara, pero ella me decía que no. Le gustaba su trabajo y le decía, mira tienes cuatro hijos y ella me decía, 'si me toca que mis hermanos me hagan el favor'".
En su casa de la colonia Francisco Villa, donde Patricia también había fincado, se llevó a cabo la velación del cuerpo de la sub comandante de la Policía de Torreón, que murió en el cumplimiento de su deber, al atender al reporte de un asalto a un bazar en la zona centro, el 14 de abril.
Cuatro hijos lloran
Paty, como le decían de cariño sus familiares y amigos, dejó en la orfandad a una hija de 16 años, y tres varones de 14, 7 y 6 años respectivamente. Su padre pide que por favor las autoridades respondan con las compensaciones que corresponden por ley por la muerte de Patricia y que no dejen en el desamparo a sus cuatro hijos.
Para los asaltantes pide que se les aplique la ley y entre sollozos con un álbum de fotografías en sus manos, recuerda que la mañana del miércoles alcanzó a despedirse de su hija: "Ya me voy hija, que Dios te bendiga. A ti también Papá".
FUNERAL
Apoyo del Municipio
La familia de Ana Patricia Ruelas Ramírez, la mujer policía que murió el miércoles en cumplimiento de su deber durante el asalto a una casa de empeño, recibirá el apoyo del Municipio.
Dijo el alcalde Eduardo Olmos que se autorizaron los gastos funerarios para la servidora pública. "Pero además me voy a reunir con la familia, con los hijos que dejó".
