SU SALUD BUCAL
PRÓTESIS HÍBRIDA
Los dientes e incluso las raíces residuales pueden y deben aprovecharse para el anclaje protésico o de las placas, suponiendo que la situación individual lo permita. Esto tiene una gran importancia para el paciente, tanto desde el punto de vista anatómico y funcional, como también psicológico. La posibilidad de conservar y continuar usando una estructura radicular ofrece ventajas importantes. Los receptores periodontales o sea la membrana o estructura de tejido que le une al hueso permanecen en funcionamiento. Las actividades de éstos disminuyen la reducción del hueso alrededor del alveolo o cavidad donde está integrada la raíz en el hueso. El sistema nervioso central reacciona con mucha sensibilidad a los estímulos propios del cuerpo y los usa, entre otras cosas, para controlar las coordinaciones complejas en los desarrollos de movimiento funcionales, por ejemplo al masticar.
La transmisión de los estímulos se realiza a través de las fibras nerviosas periodontales altamente sensibles, las cuales ya reaccionan a partir de un umbral de estímulo tan bajo como 2 micrones. Estos valores son poco mayores en el área de los dientes laterales de los dientes del frente. Dichos receptores regulan entre otras cosas, las actividades masticatorias de la musculatura y por esta razón juegan un papel fundamental en las coordinaciones funcionales de músculo-hueso. Por lo tanto, desde el punto de vista físico, un anclaje radicular puede contribuir considerablemente a mejorar el control de las fuerzas que actúan sobre una prótesis removible a través de una óptima coordinación. Esto incrementa la comodidad de uso para el paciente y con ello también aumenta la aceptación esencial de este tipo de solución protética por parte del paciente.
Las prótesis totales o placas con una fijación parcial en dientes y raíces restantes tienen su origen en las escuelas anglosajonas y en inglés se denomina "overdenture". En las regiones de habla alemana, esta técnica en general se describe como "prótesis híbrida o de cubierta". Al mismo tiempo, la morfología o forma de su estructura y el alcance de la porción removible de esta clase de solución protética corresponden en gran medida a los requerimientos planteados tradicionalmente a una prótesis total. Las porciones fijas permiten que precisamente en la dinámica se logre una mejora funcional del sostén de la prótesis. En la planificación clínica del tratamiento, se debe poner mucho cuidado en la determinación de las zonas que puedan aprovecharse como soportes radiculares. Un soporte radicular entero reduce la carga ejercida sobre la mucosa, sin perjudicar la necesaria estabilidad y retención. La incorporación de anclajes radiculares en las prótesis híbridas también permite una oclusión o manera de morder que ya no corresponde a los criterios de colocación tradicionales de la prótesis total orientados en la retención. Los grandes éxitos en la implantología y en la prótesis sobre implantes han llevado a que de forma cada vez más frecuente se practique un aumento de fijaciones mediante implantes para el anclaje de las prótesis dentales. Los implantes también pueden ser convenientes para el anclaje de prótesis totales, aunque en el caso de las así llamadas prótesis overdenture siempre se debería hacer lo posible por conservar los dientes o raíces dentales restantes. Estos dientes se pueden integrar a la solución protésica, con el objeto de lograr que el paciente experimente una transferencia natural de los estímulos de la prótesis al hueso.
La higiene bucal naturalmente juega un papel muy importante por parte del paciente, esto rige especialmente para las combinaciones protésicas fijas y removibles, porque solamente una encía o periodonto sano y en el caso cuando hay implantes o tornillos fijados al hueso, una buena higiene en la zona alrededor de éstos permiten obtener un éxito de larga duración.
