Los costos para controlar un derrame en el Golfo de México y limpiar sus consecuencias subió a 2 mil 650 millones de dólares, informó ayer el gigante petrolero BP, pero la compañía negó versiones procedentes de Rusia de que su director Tony Hayward haya renunciado.
Los gastos de la empresa subieron a un ritmo de 100 millones de dólares por día durante el fin de semana, según un documento presentado el lunes ante la Comisión de Valores, en tanto los ingenieros estaban atentos al avance de la tormenta tropical "Alex" por el Golfo de México.
El meteoro es el primero de la temporada que llega al Golfo, amenazando con interrumpir los trabajos de limpieza en el enorme derrame de crudo, incluso aunque está distante.
Según la agencia de noticias oficial de Rusia, RIA Novosti, un alto funcionario ruso dijo que se preveía la dimisión del director general de BP, Tony Hayward.
En el Golfo de México, la tormenta tropical "Alex" tendía a fortalecerse, con la posibilidad de convertirse en huracán en las próximas goras, dijeron meteorólogos, mientras su vórtice cruzaba el mar abierto, desde la península mexicana de Yucatán hacia la costa nororiental de México.
La ruta dista de la zona del derrame petrolero frente al litoral de Louisiana en el sur de Estados Unidos, pero la tormenta podría generar olas de hasta 4.5 metros y vientos de 32 a 48 kilómetros por hora en su periferia, lo que podría tocar el área del derrame, dijo Stacy Stewart, experto del Centro Nacional de Huracanes en Miami.