Grecia se ha quedado sin transporte público debido a una huelga de 24 horas contra la política de austeridad del Gobierno, mientras que los periodistas helenos secundan otro paro contra los recortes de salarios y los cambios en la seguridad social.
Sólo los trenes de cercanías hacia el aeropuerto internacional de Atenas, el transporte por tren y los barcos estarían ayer operativos en la capital griega y en el resto del país.
El resto de los transportes públicos se encontraba fuera de servicio desde las 03:00 horas.
Tanto los periodistas como los trabajadores de los medios de transporte han sido convocados por sus sindicatos a que se manifiesten en Atenas y en las principales ciudades en protesta contra lo que califican como la pérdida "de derechos laborales y de puestos de trabajo".
A partir de las seis de la madrugada local de ayer y durante 24 horas se inició también un "apagón informativo" en todos los medios griegos a excepción de un par de páginas digitales de información en Internet.