El número de víctimas mortales por un deslizamiento de tierra ocurrido este lunes en el estado de México (centro) debido a las fuertes lluvias se ha elevado a diez, informaron a Efe fuentes del Ayuntamiento de Villa de Guerrero, en cuyo término municipal tuvo lugar el deslave.
Además, hay dos heridos que permanecen hospitalizados y se descarta "por el momento" que queden personas bajo la tierra y las rocas que cubrieron una carretera, sepultando a varios vehículos que circulaban por ella.
Al no haberse reportado ninguna persona desaparecida en los municipios cercanos, las autoridades están barajando suspender las labores de búsqueda.
Por otro lado, un portavoz de la Junta Local de Caminos del Estado de México explicó a Efe que la carretera afectada está ya "prácticamente en condiciones" y podría reabrirse hoy o mañana, una vez que se aplanen los aludes en la zona para evitar nuevos deslaves.
Los hechos se produjeron en torno a las 22.30 horas de este lunes (3.30 GMT), cuando un tramo de unos cien metros de longitud de un cerro ubicado en el municipio de Villa Guerrero se vino abajo y sepultó la carretera que circula unos trescientos metros por debajo, en la que se encontraban los afectados.
Todos ellos habían descendido de sus vehículos para retirar un árbol caído que obstruía el paso, y fue en ese momento cuando se vieron sorprendidos por el deslave.
El deslizamiento del terreno podría estar relacionado con un canal de riego que discurre por la zona, así como con las intensas lluvias que cayeron en los días anteriores en la región.
Las precipitaciones registradas durante septiembre en México han aumentado el riesgo de corrimientos de tierra en todo el país, provocando desalojos, y han anegado varios estados del sur y el sureste.
