El número de muertos provocado por las fuertes lluvias que afectaron esta semana a la ciudad brasileña de Río de Janeiro ascendió a 221, informó el Cuerpo de Bomberos.
El mayor número de víctimas se ha registrado hasta el momento en la ciudad de Niteroi, contigua a Río de Janeiro, donde los bomberos han recuperado los cuerpos de 138 personas.
En Río de Janeiro, en tanto, las autoridades confirmaron la muerte de 63 personas y al menos otras cinco permanecen desaparecidas en el cerro Prazeres, donde deslizamientos de tierra provocaron la muerte de 15 personas.
Las lluvias también causaron muertes en San Gonzalo (16), Nilópolis (1), Pacarambi (1), Petrópolis (1) y Magé (1), precisaron las autoridades.
El alcalde de Río, Eduardo Paes, informó ayer que los habitantes de parte del Cerro de Urubu, en la zona Norte de la ciudad, comenzaron a abandonar sus viviendas ante el peligro de nuevos deslizamientos de tierra provocados por las fuertes lluvias.
Indicó que en la zona que comenzó a ser evacuada habitan unas cinco mil personas y que 300 casas que habían sido declaradas inhabitables por la Defensa Civil, comenzaron a ser demolidas, mientras sus propietarios recibirán una ayuda económica para comprar otra.
El gobernador de Río de Janeiro, Sergio Cabral, en tanto, ordenó ayer la evacuación inmediata de los habitantes del cerro de Ceu, en Niteroi, porque corren un riesgo inminente.
"Es un área de riesgo inminente, una cosa dantesca. Vamos a retirarlo inmediatamente", dijo.
Desde el pasado lunes, se han registrado decenas de derrumbes en distintos cerros del área metropolitana, el más grave de ellos en el Morro do Bumba, de la ciudad de Niteroi, donde desde la noche del miércoles se concentra el grueso de las tareas de rescate.
