Aeronave. De los 3,424 vuelos programados para la jornada de ayer, se han cancelado 2,609 hasta ahora.
España tardará varias horas en recuperar la normalidad total en su aeropuertos tras el enorme caos provocado por el plante masivo de los controladores aéreos, informó el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba.
"La normalización completa de los aeropuertos tardará en producirse probablemente en torno a 48 horas. Ello es debido a los ajustes técnicos que hay que hacer en los planes de vuelo y, al mismo tiempo, a la necesaria coordinación que hay que rehacer con Europa", explicó Rubalcaba en una rueda de prensa.
El también ministro de Interior garantizó que no volverá a haber problemas en los aeropuertos ni en Navidad ni después, y aseveró que el Ejecutivo está firmemente comprometido a impedir que una minoría, como los controladores aéreos, ponga en jaque el interés general.
"Esto -subrayó- no va a volver a pasar. Tenemos mecanismos legales, y lo hemos demostrado, para impedir que vuelva a pasar".
El vicepresidente primero recalcó asimismo que el "estado de alarma", declarado ayer con una duración de quince días, se podría prolongar si fuera necesario.
Rubalcaba confirmó que "poco a poco" los aeropuertos españoles "están recuperando su normalidad", ya que "más del 90 por ciento de los controladores está trabajando en sus puestos" y se trata de "una cifra que podríamos considerar normal".
Hasta las 21:00 horas, Aena había operado ya 241 vuelos en toda su red de aeropuertos, informaron fuentes del gestor aeroportuario.
Así, de los 3,424 vuelos programados para la jornada de ayer, se han cancelado 2,609 hasta ahora.
El titular de Interior tildó de "huelga salvaje" y "sucesos gravísimos" el paro masivo que los controladores iniciaron este viernes sin aviso previo y que dejó en tierra a más de 600,000 pasajeros. "Es evidente -insistió- que ha sido un suceso de una enorme gravedad y que ha tenido consecuencias muy dañinas" para el país.
La reapertura del espacio aéreo español se produjo después de que el Gobierno decretara ayer por la mañana -por primera vez desde en la etapa democrática- el "estado de alarma", que "moviliza" y pone bajo disciplina y ley militares a los controladores aéreos.