La Arquidiócesis de Durango informó que fueron sustraídas ocho piezas de arte sacro que se exhibían diariamente en la Galería Episcopal de la Catedral Basílica Menor de Durango, todas de importante valor material, histórico, artístico y cultural.
La administradora de la Catedral y los guías custodios se percataron del ultraje y sustracción de las piezas, por lo que dieron parte a las autoridades competentes.
Al hacer la inspección y de acuerdo al peritaje se determinó que había ocho objetos faltantes, todos ellos de importante valía histórica que son: dos cálices, tres ánforas de plata para los santos oleos llamadas “crismeras”, un Cristo de marfil de aproximadamente 70 centímetros, el cual fue desprendido de su cruz de madera y dos jarrones medianos de porcelana china.
Desde el primer momento, se presentó la denuncia formal a las autoridades correspondientes por parte de la Arquidiócesis, quien reprobó este hecho al considerarlo como un acto sacrílego, ya que atenta contra el patrimonio de la Iglesia local, y que además es patrimonio cultural y artístico.
Sobre este hecho el delegado de la PGR en Durango, Zacarías Francisco Cabrera Oliver, informó que lleva a cabo una investigación tras el reporte de robo por parte del INAH sobre objetos religiosos robados por lo que se procedió acudir al lugar ya estaban Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), quien realizaron una primera inspección.
Cabe hacer mención que este espacio con circuito cerrado pero los ladrones grafittearon las cámaras de este equipo.
