Un taxista camboyano fue detenido por la Policía tras amenazar con lanzarse a un río cuando los veinte pasajeros que llevaba se negaron a pagarle un suplemento, informó la prensa local.
El suceso ocurrió en la provincia de Prey Veng, donde el conductor había acordado llevar en su furgoneta desde la capital a los clientes por dos dólares cada uno, según el diario "Phnom Penh Post".
Sin embargo, antes de llegar al destino, el taxista paró el vehículo y anunció que la tarifa había aumentado hasta los cinco dólares.
Cuando los pasajeros se negaron a desembolsar el suplemento, el timador les advirtió de que si no lo hacían, todos morirían ahogados porque estaba dispuesto a conducir el taxi hasta un río cercano.
Un cliente llamó a la Policía, que arrestó al taxista y trasladó al grupo hasta su destino de forma gratuita.
La empobrecida Camboya carece de un sistema de transporte público regular, y por lo general la mejor forma de viajar por el país es en taxis o minibuses privados, sin tarifa fija.