Diego Jiménez celebra un gol de su equipo, Tecos. Tecos gana y Miguel Herrera respira
Zapopan, Jal.- Emocionado, con la seguridad de que había salvado el puesto, Miguel Herrera accedió a todas las peticiones de fotografías que recibió en su camino al vestuario.
La dramática victoria de los Estudiantes-Tecos sobre el San Luis (3-2) fue el bálsamo que necesitaba. Se lo dio Ramón Morales, con aquella mágica ejecución de tiro libre (minuto 82).
El "Piojo" Herrera confió en el experimentado volante y hoy se lo retribuyó en el momento más importante, justo cuando Christian Martínez parecía entercado en echar al estratega.
Los dos goles potosinos se debieron a claros errores del guardameta, quien confirmó su paupérrimo nivel. Sólo es titular por la amistad que lo une con Herrera, aunque -por su actuación- parecería que son enemigos enconados.
Tensa noche para el carismático entrenador de los tapatíos. La inició nervioso, en la zona técnica. Todo terminó con festejo en el camerino, previa escala en las gradas, donde presenció la última media hora, luego de ser expulsado por sus airadas protestas al cuerpo arbitral encabezado por Alfredo Peñaloza.
Reflejo de lo difícil que era su situación... Hasta que Morales se paró junto a aquel balón, para después anidarlo en la portería visitante. Respiro para un jugador que fue despedido por el Guadalajara y un timonel que evitó serlo la noche de ayer.
Al minuto 22 cayó el primer gol de Estudiantes. Samuel Matellán atrasó al cancerbero potosino César Lozano, quien intentó despejar de primera y sólo rebanó para entregar el balón dócil para que Samuel Ochoa anotara el primer tanto de Estudiantes con un buen disparo pegado al poste izquierdo ya sin el obstáculo del guardameta.
El empate vino al minuto 45, tras una jugada individual del ecuatoriano Michael Arroyo, quien avanzó y se quitó la marca de sus contrincantes con facilidad para hacer un disparo pegado al poste ante el inofensivo lanzamiento de Christian Martínez.
