Liberan. Los charcos de aguas negras que pasaban frente a la escuela primaria fueron aspirados por maquinaria de Simas.
Madres de familia de la colonia Jesús Aguilera, manifestaron su temor ante un rebrote de hepatitis luego de que el año pasado se registraran cinco casos en la escuela Melchor Múzquiz.
Las madres aseguraron que las condiciones en las que se encuentra el plantel educativo no son las óptimas.
La motobomba de la cisterna de los baños se quemó y a la fecha no se ha reparado por falta de recursos. Los menores, o sus madres, tienen que cargar cubetas con agua cada vez que hacen uso del sanitario.
Por su parte, el personal de la institución señaló que las carencias de la escuela, que incluyen la falta de una barda y la correcta instalación del cableado eléctrico, están en vísperas de ser subsanadas.
"Esperamos entrar a un programa que se llama Escuelas de Calidad. Con los recursos que se obtengan podremos subsanar todas las carencias", dijo Édgar Machado, maestro.
UNA MÁS
Hace días, los alumnos tuvieron que soportar los olores que despedían los frecuentes brotes de aguas negras frente a la escuela. Esto generó la proliferación de moscos e insectos.
