Haga sus propios frotadores para lavar trastos hechos de nylon. Un pedazo de nylon de aproximadamente dos metros rinde para hacer seis fibras de 15 cm. más o menos. Deje que estas medidas sean su guía para comprar la cantidad de red de nylon que necesite. Ensarte una aguja grande, preferentemente con estambre, o con dos o tres hilos para coser, después haga una bastilla en el centro de las tiras que previamente cortó del tamaño adecuado. Jale el estambre de cada extremo hacia el centro tan firmemente como pueda, haciendo un fruncido. Ate los dos extremos del estambre juntos. Una con seguridad y corte el exceso de estambreo úselo para hacer una "oreja" y colgar de ella la fibra.
Otro uso que puede darle a las charolas de espuma plástica en donde empacan la carne en los supermercados es envolver regalos que van a enviarse por correo. Tome dos charolas y coloque el artículo en medio, asegurándolo con ligas de hule y envolviéndolo. No aumentará mucho el costo del franqueo porque las charolas son muy ligeras. También cuando esté empacando, puede cortar las charolas en pedazos pequeños y colocarlos en los espacios de una caja. Es conveniente tener en mente que a todas las cosas pueden dárseles un uso adicionado. Apuesto a que hay cientos de cosas que podemos usar una y otra vez.
Le sugiero a usted que hornee sus pasteles en latas vacías de café los cuales puede congelar o llevar a un amigo enfermo, o para cualquier otra ocasión cuando quiera tener listo un pastel. Es muy fácil rebanarlos en fondo. Usted podrá, si lo desea, añadir escarcha. Tenga siempre uno de estos pasteles listo para cuando los amigos vayan a tomar un café a su casa. Dependiendo de la receta, podrá llenar una o dos latas. Esto hace pasteles más pequeños que se comen con más facilidad y no se echen a perder o se sequen como los pasteles de tamaño regular.
Corte tiras dobles de un metro de largo de tul de nylon, tréncelas y forme una rueda. Ahora cósalas con hilo grueso para que no se desbarate la rueda y úsela para limpiar papas, la piel de diversas frutas y legumbres, la tina de baño, el lavabo y todo aquello que necesite de una fuerte fricción. Tenga varios frotadores de este tipo, destinando un color diferente para cada fin.
Si sus niños andan detrás de usted pidiéndole con qué ayudarle a sacudir, deles calcetines viejos de su papá. Haga que metan en ellos sus manos y que los usen para quitar el polvo de los muebles. Harán mejor trabajo y se divertirán.
