Vaqueros Laguna firmó al dominicano Henry Mateo para tratar de suplir a Dionys César, que después de ganar la corona de bateo y ser el Más Valioso en la Liga Mexicana pasada se fue a jugar al oriente con muy buen contrato de miles de dólares. Naturalmente eran palabras mayores para Mateo, que de todas maneras estaba bateando .303 con Laguna al momento que le dijeron que lo tenían que dejar ir debido a que necesitan reforzar el pitcheo en donde ocupan el último lugar. Fue entonces que los Diablos Rojos decidieron contratarlo, ya que tienen un hoyo en la segunda base al salir Carlos Valencia, que fue operado de una rodilla.
Mateo fue el segundo draft amateur del Expos de Montreal en 1995, siendo firmado por el famoso buscador Fred Ferreira que ahora es agente de jugadores. Fue en el 2003 cuando tuvo mayor oportunidad de jugar y conectó 37 hits en 169 veces al bat para un promedio de .240. También jugó en Ligas Mayores durante las temporadas del 2005 y 2006.
En Ligas Menores estuvo 15 años con un promedio de .271, siendo su cifra más alta en jonrones la de cinco en una campaña. Mateo bateó dos jonrones en el Foro Sol en la primera visita del Laguna y dio otro al debutar con los Diablos el martes pasado. Es un buen fildeador, tiene velocidad para robar bases y es un jugador de carisma.
Un gran trabajo realizó el derecho venezolano Edwin Moreno al debutar con los Diablos Rojos el miércoles en el Foro Sol, ya que trabajó las primeras cuatro entradas contra Tecolotes en cero carerras y dos hits aceptados. Moreno fue pitcher estrella de Minatitlán hace tres campañas, cuando se lo llevaron los Padres de San Diego por recomendación de Roberto Mansur. Hace un año tuvo 19 juegos con los Padres en las Ligas Mayores y 39 encuentros en la sucursal de Portland. Se lesionó durante los entrenamientos del México y se perdió el primer mes de campaña, pero ahora comenzó con un gran trabajo.
Nos dijeron que el viejo Parque La Junta sigue en pie y lo usan para los juegos de la primera fuerza de los amateurs de la frontera. El nuevo parque queda en las afueras de la ciudad, y por no haber ninguna edificación alrededor, hace un viento tremendo, aunque explican que este año ha bajado de intensidad respecto a la campaña pasada.
