El mundo de la Liga Mexicana fue sacudido por la página de Internet del circuito en que informa cómo el famoso manager Lino Rivera, de los Leones de Yucatán, ha quedado suspendido indefinidamente por nuevamente estar atacando verbalmente y con palabras gruesas a los ampayers. La suspensión indefinida de Rivera está ahora en manos del comité ejecutivo del circuito, que es algo así como el Alto Comisionado que antes teníamos.
Es la segunda ocasión en poco tiempo que Lino es castigado, ya que hace poco lo tuvimos fuera de acción por tres días al utilizar un lenguaje grosero contra los hombres de azul para reclamar los conteos de bolas y strikes.
Lino Rivera es el manager que tiene más cartel en toda la Liga Mexicana y nunca había tenido problemas en los años que ha manejado al Leones de Yucatán, mismo al que llevó al campeonato y luego perdió una serie final.
Antes de comenzar la campaña actual y cuando se sabía que los Diablos ya no iban a traer a Daniel Fernández de regreso, se llegó a comentar que Lino podría ser el nuevo timonel escarlata. Todos admiran a Lino, pero Roberto Mansur dijo que no podría contar con Lino porque pertenecía a los Leones y la directiva del Yucatán dijo que no tenían ninguna intención en dejarlo fuera del equipo.
Ahora, con esta nueva suspensión, Lino podría quedar fuera de la liga por toda la temporada y entonces los Leones tendrían que poner a un manager de repuesto. El club tiene grandes posibilidades para ir al play off, es casi seguro.
No hace mucho este equipo peninsular hizo el cambio de Willie Romero al Saltillo por Sandy Madera, mismo que fue aprobado por Lino Rivera. Madera es el dominicano que al debutar en la Liga está peleando por la corona de bateo y que en invierno, con Los Mochis, ganó la corona ofensiva con un promedio arriba de los .400.
Hacía mucho tiempo que no teníamos un caso como el de Lino Rivera, mismo que nos hace recordar los viejos tiempos cuando había managers feroces tanto en el lenguaje como con los puños como Tomás Herrera que se hizo famoso dirigiendo a los Diablos Rojos. Estamos ya en otros tiempos y los ampayers, como debe ser, son más protegidos. Y ciertamente no merecen insultos cuando alguien les va a protestar.
