Los ocho días de descanso que tuvo Cliff Lee al lanzar solamente en un juego del segundo play off terminó perjudicando al pitcher zurdo Cliff Lee, quien había sido la sensación entre los lanzadores de estos juegos de postemporada con dos victorias sobre Tampa Bay y una sobre los Yanquis en la serie por la corona.
Al abrir el primer juego de la Serie Mundial explotó en la quinta entrada cuado los Gigantes de San Francisco anotaron hasta seis carreras y terminaron ganando 11-7 a los Rangers de Texas que arrancaron como favoritos por tener precisamente por estar Lee como abridor. Se vio claramente cómo su curva se quedó altísima por tanta inactividad y al no poder tener control sobre su recta fue acribillado. Los Gigantes tienen fama de ser poca cosa en el bateo pero lo trajeron de la seca a la meca. Se recuerda que también CC Sabathia tuvo ocho días de descanso al ganar Yanquis rápido el primer play off y ya no pudo ser el mismo en las batallas por la corona. Logró ganar un juego pero explotó en su primera salida.
No hay duda que los pitchers, en su gran mayoría, son hijos del trabajo, y cuando pasan más de los cuatro días acostumbrados de descanso están en problemas para poner sus lanzamientos en los lugares que lo acostumbran.
Tim Lincecum lanzó con sólo tres días de descanso y estuvo mal en los dos primeros innings en que Rangers tuvo todo para poder lograr un rally y tomar una buena ventaja, pero solamente lograron dos anotaciones. Allí perdió Texas la oportnnidad de ganar y luego comenzaron a cometer errores para terminar con cuatro. Fue vergonzoso.
Muy mal se vio Vladimir Guerrero en la defensa del jardín derecho y es probable que ya no juegue en el segundo partido. Por los Gigantes, el dominicano Juan Uribe volvió a ser un gran héroe al conectar jonrón de tres carreras que le dio la gran ventaja al Gigantes, mientras en la tercera base tuvo una gran defensa.
Lincecum fue el ganador pero aceptó cuatro carreras y duró poco, con los relevistas estando bastante mal.
A fin de cuentas fue Monte Irvin, a los 91 años de edad, el que tiró la primera bola. Se levantó de su silla de ruedas y desde cerca del home la llegó de aire al catcher.
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Como se podía esperar hubo bajas entradas en la Liga del Pacífico al comenzar la Serie Mundial, con 642 solamente en Navojoa, tres mil en Obregón, cuatro mil en Culiacán mientras en Guasave ni siquiera contaron a los asistentes.